El hijo de Matamoros se siente muy dolido después de que su padre le vendiese el día de su boda por asistir al enlace por dinero, en concreto 16.000 euros. Además, afirmó que en sus recuerdos del día más feliz de su vida, no se acuerda de su padre y se queda con lo vivido con su mujer y sus seres queridos. Para terminar, concluyó hablando de su madre, persona que siempre se ha mantenido al margen en las disputas familiares entre ellos. Diego Matamoros respondió a las personas que le preguntan que por qué hace eso con su padre diciendo que "con mi madre no haría eso en mi vida, porque mi madre siempre me ha respetado y me ha querido", a diferencia de su progenitor.
Laura Matamoros, de hermana querida a enemiga
Además de cargar contra su padre, también atacó a Laura Matamoros, que fue su madrina en su boda, asegurando que se ha convertido en la nueva sociedad limitada de su padre y que el acercamiento de ambos es por puro interés económico del patriarca de la familia. Diego Matamoros está muy dolido con su hermana, asegurando que no le coge el teléfono desde hace dos semanas porque se siente muy abandonado por ella: "Sé que está con mi padre y yo no le valgo. Siempre la voy a querer, pero se está confundiendo con el tío que le está sacando la pasta, al final me dará la razón". Parece ser que la familia ha llegado a un punto de no retorno y que todas las relaciones entre ellos están rotas definitivamente.