Emma García le recibía y le hacía una breve entrevista: "Estoy raro. Hace un mes que no vengo. Lo primero darle las gracias a todo el mundo, ni en mis mejores sueños podría imaginar tantísimos mensajes de personas que conozco, de personas que llevaba muchísimos años sin tener contacto con ellos y personas que no conozco", comenzaba diciendo. Tras esto, Arrabal explicaba cómo sucedió todo: "Me infecto, la primera semana mi mujer también se infecta, ella tiene dos días mal pero yo estoy fenomenal. Nada de fiebre y todo bien, yo creía que iba a ser así".
Las cosas se fueron complicando para el colaborador: "Hay un día en el que empieza a subirme la fiebre, 39, 40, no se me quita, el paracetamol me hacía efecto diez minutos, imposible quitarlo. Me fui a urgencias a las dos de la mañana, me hacen una placa y una analítica. La placa confirma una neumonía bilateral y la analítica es lo que a los doctores les preocupa. No era muy halagüeña. Deciden ingresarme en urgencias. Yo respiraba bien, lo único que tenía era la fiebre. Cuando ya llevaba allí dos o tres horas empiezo a no respirar bien, no sé si era de la angustia, de que mi cuerpo iba empeorando como los médicos suponían por la analítica...", relataba.
No cumplir las normas tiene consecuencias
"Me quité la mascarilla por la tarde, venía un amigo, nos saludábamos y al final nos contagiamos cuatro compañeros. Ese día y medio no paraba de darle vueltas a eso. Toda la gente me decía 'lucha Diego' y digo yo, ¿por qué no luché una semana antes? Era tan fácil como no quitarme la mascarilla. Son situaciones muy extremas y cuando tú escuchas en cualquier medio que hay gente que todavía no se lo cree, yo invito a todo el mundo que pasen por el hospital diez minutos y va a ver la cruda realidad. Vas a ver familias rotas por completo. Estuve seis días porque la fiebre no me bajaba. Los doctores cruzaron dos antibióticos y mi cuerpo reaccionó", relataba el colaborador. Además, asegura que tener esta enfermedad te vuelve más sensible: "Te conviertes en la persona más chica del mundo. Todo te parece un mundo, cualquier mensaje. Hasta los enemigos más grandes son amigos en ese momento".