Galería: Rocío Flores en imágenes
La inauguración de una sala dedicada única y exclusivamente a José Ortega Cano en el museo de San Sebastián de los Reyes ha sido un momento muy especial para toda la familia, a pesar del caos inicial que ha embargado a la multitud que se ha reunido a la entrada del edificio para presenciar un momento tan importante para el clan Ortega Cano. El torero se ha dejado ver feliz y muy ilusionado por el homenaje que se le ha dedicado, permitiéndose olvidar, por unas horas, todos los problemas que rodean su vida, especialmente tras su divorcio de Ana María Aldón. Pero Ortega Cano no ha sido el único rostro conocido en la sala, su familia, aunque no al completo, y también muchos amigos y conocidos, han estado presentes. Uno de esos invitados ha sido nada más y nada menos que Rocío Flores, que ha hecho un hueco en su agenda para pasarse a visitar a un "familiar".
Después de su alejamiento de la televisión, los periodistas han aprovechado la ocasión para preguntar a la joven por toda la polémica que rodea a su familia, algo a lo que ya debe de estar acostumbrada. Sin embargo, Rocío Flores ha decidido callar como respuesta, sin querer responder a los reporteros: "Es mi familia y vengo a verla, ¿qué hago?, ¿no puedo?", ha comenzado diciendo, respondiendo a los periodistas que le preguntaban por el motivo de su asistencia al evento. La hija de Antonio David Flores ha asegurado que acudía al "nuevo proyecto" de Ortega Cano para "apoyarle" por el gran cariño que le profesa. Como justificación, asegura que ha aprovechado una visita al médico en Madrid para pasarse y saludar, y ha estado en todo momento muy unida a su tía, Gloria Camila.
Porque le apetece
" He venido porque me ha apetecido, es mi familia y tengo todo el derecho a venir, quien lo quiera entender, que lo entienda, y quien no lo quiera entender, que no lo entienda", ha zanjado, asegurando que ese era el único motivo de su asistencia y dando el tema por cerrado. Rocío Flores se ha mostrado, en todo momento, muy seria con la prensa, sin querer entrar en detalles y huyendo de los micrófonos que antaño tanto quería : "No voy a comentar nada". Sin embargo, el verdadero enfrentamiento de Rocío Flores con los reporteros ha llegado cuando ha tenido que responder a Kiko Calleja, enviado de 'Sálvame', con quien la hija de Rocío Carrasco no mantiene muy buena relación: "No tengo nada que hablar con 'Sálvame'. Te lo agradezco, estoy aquí porque al final soy una persona educada y me da hasta cosa girarte la cara, pero no tengo nada que decir".
Así, Rocío Flores muestra su enemistad con la prensa y su deseo de no hablar con los reporteros. Tampoco ha querido responder a las preguntas de cómo está llevando la separación de su padre y su exmujer, Olga Moreno, así como la tensa relación que esta última mantiene con su familia. A la pregunta de si es culpable de algo, Rocío Flores ha respondido con tono irónico que ella tiene la culpa "hasta de vivir".
Los frentes abiertos de Rocío Flores son muchos, por eso se ha cuestionado tanto cada uno de sus actos. De su presencia a la inauguración del homenaje a Ortega Cano, muchos han deducido que podría haberse tratado de un "zasca" a su madre, Rocío Carrasco, especialmente después de no asistir a la inauguración de otro museo de una persona muy cercana a ella: su abuela, Rocío Jurado. Al ser preguntada por esa posibilidad, Rocío Flores se ha mostrado muy sorprendida y un tanto desconcertada, negándolo y asegurando que el único motivo de su asistencia era el mostrar su apoyo a Ortega Cano.