Esa declaración comienza con la pregunta de la Jueza sobre el motivo que le ha impulsado a poner esa demanda: "El hecho es llevar 17 años soportando el que una persona difame, me arrebate lo más grande que puede tener una madre que son sus hijos. Tener que escuchar todo tipo de barbaridad, de infidelidades, de mala madre, de que he abandonado a mis hijos, que no los he cuidado, que no me he preocupado. Esto no cesa. Yo ya lo he hecho todo para procurar que este hecho cesara y no termina, va a más. No tiene final y yo no puedo más".
Rocío Carrasco también es preguntada por el tratamiento psiquiátrico que tiene pautado: "Estoy en tratamiento desde hace seis años, desde 2011. Yo no he querido nunca acudir a un psiquiatra ni a un médico precisamente porque estaban en proceso todos estos procedimientos para quitarme la custodia de mis hijos y yo no quería por nada del mundo que este señor pudiera agarrarse a que yo no estaba bien psicológicamente y darle un arma para que lo usara mediáticamente y judicialmente".
Desesperada con la situación
Además, continuaba diciendo: "Este señor ha hecho que mis hijos me odien. Me ha privado del amor, del cariño, del respeto, de la confianza de mis hijos. Lo ha hecho privada y públicamente. A mí me da vergüenza salir a la calle. Que me desmerece como mujer, como persona, que me coarta que me mutila, que yo tengo un trabajo que tiene que estar de cara al público. Yo no he podido trabajar en muchísimas ocasiones porque no me atrevo", concluía la cinta. No cabe duda de que el dolor que Rocío Carrasco ha pasado y pasa es inmenso.