La colaboradora ha vuelto a Telecinco después de casi 3 meses desde que sufrió una importante lesión en el plató de 'Sálvame'.
Tras casi 3 meses desde que sufriera una aparatosa caída en el plató de 'Sálvame', Belén Esteban volvía a sentarse en el plató del 'Deluxe'. La de Paracuellos asegura que ha tardado tanto en retomar su trabajo, no por la pierna, "por mi cabeza". Los problemas que no sufrió los últimos meses y que no todos fueron a raíz de su caída hicieron que se sumiera en "una tristeza constante" que le impedía anímicamente coger de nuevo las riendas de su vida a pesar de las vicisitudes.Y es que nada más entrar en plató para hablar con Jorge Javier Vázquez esta reconoció que "he pasado 5 veces por quirófano en 3 meses" y no siempre fue por la pierna, adelantando así más problemas de salud hasta ahora desconocidos. "He llamado hoy a los productores y también a los más cercanos a mí: mi madre, mis hermanos, mis amigas Maraví y Tina... solo lo sabíamos los que vivimos en casa. Desde aquí a mi madre y a mis hermanos les pido perdón, que lo han sabido hoy", reconocía.
La colaboradora había llevado todo esto en secreto porque no había recibido los resultados de las pruebas médicas hasta 24 hora antes, motivo por el que prefirió llevar todo esto en secreto hasta conocer la gravedad de lo que podría tener: "Desde hace un par de años me salen unos bultos en el pecho. Tengo 48 años y, como mujer, empiezo a tener 'desarreglos'. El 6 de julio me tocaba revisión de pecho y salen bien. Los bultos los sigo teniendo, pero no tengo peligro", explicaba.
En cambio, en otra de las pruebas no fue todo igual de bien: "Luego me hace una ecografía vagina en la que ven que el endometrio lo tengo más grande de lo que lo tengo que tener. El año pasado estaba perfecta y este no. Ella le quitaba importancia, pero cuando me lo decía ella algo había que no estaba bien. Notas que no pasa nada, pero pasa. Yo pensé de todo", decía sumando así una preocupación más a su cabeza que no hacía más que minar su salud mental.
La ginecóloga solo le dijo una cosa: si sangraba tendrían que operarla. "El día que doy la exclusiva a Semana, haciéndome las fotos, había sangrado. Me dicen que me tienen que hacer una biopsia urgente", confiesa sin evitar emocionarse: "Yo entro en un estado de pena, pienso mal, me veo con la pierna, y luego me viene lo otro...". Sin decirle nada a nadie, Belén Esteban pasó de nuevo por quirófano el pasado sábado 16 de julio: "Estuve dos horas en quirófano el sábado pasado. Me quitaron un pólipo y me limpiaron. Me dieron ayer el resultado y es que es benigno", decía aliviada.Un susto que, sumado a la caída, hicieron que sus problemas de salud mental fueran a peor: "Yo lo he pasado muy mal. Mi cabeza me ha jugado una mala pasada. Depresión no he tenido, pero sí tengo tristeza constantemente (...) Mi cabeza me ha fallado esta vez y estoy con ayuda, que me está viniendo muy bien", reconocía. A pesar de esta mejoría, asegura que no está preparada para ver las imágenes de su caída en 'Sálvame': "Yo no he visto la caída ni la pienso ver nunca. No estoy preparada".