Una gala llena de sorpresas, con más o menos tensión y con momentos en los que cada uno de los personajes del reality tuvieron su momento de gloria, así fue la final de '¿Quién quiere cas Los todos los pretendientes finalistas y los ya elegidos han hecho del noveno y gala final de 'Quién quiere casarse con mi hijo' un capítulo con alegrías y despechos, como la vida misma en la búsqueda de pareja.
En este contexto tan difícil, aunque sin Ra de por medio, Vicente dejó todo en manos del espectáculo, dándole una sorpresa a la antigua usanza pidiendo perdón a Sandro con un grupo de mariachis: "Te pido perdón por haberte sido infiel". "¿Me quieres?. Te amo", respondió Vicente.
Un amor a primera vista
Sandro conocía a Vicente antes de entrar al programa y desde el primer programa ambos mostraron un interés mutuo. Parece que se ha mantenido e incluso este sentimiento ha crecido y aunque con una infidelidad de por medio, Sandro dio el si quiero y puso el anillo al pretendiente elegido: "Tengo muy claro lo que siento pero, Vicente, una y no más, ahora ya nos toca".
El veredicto de mamá, a misa
Markus parece que ha dejado de lado su perfil de ideal de mujer "explosiva, llamativa, operada pero cariñosa y hogareña" y como pocos pensaban, no se ha dejado llevar por su disposición ante el 'putón familiar' y ha seguido los consejos de MJ: "De Sara sigo diciendo lo mismo, que es muy mayor para mi hijo".
Con la madre más mansa y con dos pretendientas bien distintas, el gallego eligió a Rocío: "Entré con un prototipo de mujer, pero esta vez he decidido fijarme en otras cosas, me quedo contigo", acto seguido Markus y Rocío se fundieron en un beso acompañado de los aplausos. "Suerte pareja. Yo se que he sido yo misma y aquí tienes una amiga" así se despidió una pretendienta que MJ calificó como "una ama de casa increíble".
Guerra a la suegra
Diego se ha visto entre la espalda y la pared y no es para menos, ya que Estrella y Bea volvieron a protagonizar otra de sus peleas. Enzarzadas en una dialéctica destructiva, Luján Argüelles tuvo que mediar para rebajar los nervios: "Hagamos de este momento algo bonito".
Diego encaró a su madre y le puso el anillo a Bea, quién desde el primer momento ha defendido que su futura suegra ha tenido una actitud de acoso y derribo. Al final Diego ha elegido "con el corazón" y no con la cabeza. Una decisión que da comienzo a una historia de amor que cumplirá con todos los tópicos de nuera-suegra: "Tendremos el mismo trato que Tita Cervera con Borja Thyssen y Blanca Cuesta".
El zodiaco más predecible
Por su parte, Rosa 'la vidente' -madre de David- ha hecho gala de sus creencias más profundas: las cartas del futuro. Aunque tanta es su fe en estas predicciones, en un primer momento la madrileña avisaba: "como no me guste la elemento que ha elegido, por esa puerta me largo", dudas que al conocer que su hijo había elegido a elegido a Ana saltó de alegría repitió gritando "¡Mis cartas no han fallado!".
Discreción pero decisión, así ha sido Ana durante todo el programa, una actitud que David ha valorado y que ha recompensado con una de las declaraciones más emocionantes de esta final: "A mí me gustas mucho, creo que hay una conexión entre los dos y me gustaría comenzar una historia contigo".