La periodista se abrió con sus compañeros, y ya amigos, Israel Arroyo y Víctor Janeiro, para contarles las dificultades a las que se ha enfrentado a lo largo de su vida debido a ser una persona trans: "Con 20 años me fui a vivir a Madrid sola. Quería ser yo, pero me faltaba liberarme, y una de las maneras que lo hice fue estar independizada. Empezaba la transición, pero socialmente todavía era un chico".
La valenciana se abrió incluso en un plano más íntimo, relatándoles a sus compañeros cómo fueron sus primeras relaciones como mujer, que hacían que intentara disimular su condición, mientras que a la vez, por fin se sintió libre de ser quién era: "Fueron emperifollada, con pestañas postizas, extensiones, peluca, me ponía cinta aislante para simular pecho, gracias a estar independizada en Madrid fue cuando empecé a soltarme más con los chicos, con las relaciones y me encantó".
Su vida dio un giro de 180 grados
"Yo me fui a Nueva York con una mano delante y otra detrás porque necesitaba dinero para mi operación", les contó a sus compañeros. La influencer relató cómo empezó paseando perros y cuidando niños, hasta que consiguió hacerse con un empleo, primero en un restaurante y después en otro, con el que por fin recaudó la suma suficiente y volvió de nuevo a su país natal.