Durante el pasado jueves 16 de mayo, los espectadores vivieron el momento más tenso hasta el momento de 'Supervivientes 2019'. Todo comenzó cuando a Isabel Pantoja le dieron la oportunidad de hablar en directo con su hijo Kiko Rivera. Cuando le llegó el turno de nominar a la de 'Hermano Mayor', preguntó al presentador: "¿Mi madre está por ahí?". Jorge Javier Vázquez le indicó simplemente que nominara y entonces ella no pudo evitar quejarse: "Puedo nominar pero lo que no me parece bien es que una persona hable con el exterior y aquí los demás no. No es así", dijo mientras el público le aplaudía.
Lo que ella no sabía, era que el programa le tenía reservada una sorpresa. "Dakota, teníamos previsto que hablaras con tu padre, pero por lista te vas a quedar con las ganas ", le anunció el periodista mientras ella suplicaba que le dejaran hablar con él. "Sabes qué pasa Dakota, hay cosas que no me gustan y esa es una de ellas. Es que no me gustan esas cosas porque es poner al programa en una situación que no le beneficia y creo que los concursantes no tenéis que hacerlo. Simple y llanamente. Esto también es una forma de entender y hacer televisión. El programa ha decidido que la señora Isabel Pantoja hable con su hijo y contra esto no se puede hacer nada. Uno acepta ir al programa con todas las consecuencias y tú has visto ya muchas ediciones de 'Supervivientes'. Y tú a lo que te tienes que dedicar en vez de quejarte es a sobrevivir y a pescar y a hacer el concurso", añadió.
Más enfadada que nunca la joven quiso denunciar la situación, que le parecía de lo más injusta: "Todo el mundo tiene derecho a hablar con su familia menos yo, ¡pues no me da la gana!". "Con los pollos que montabas en 'Hermano Mayor' y ahora quieres hablar con tus padres...", le reprendió el catalán. "Perdona, perdona, pero eso ya pasó. No te pases, que todas las personas tienen derecho a cambiar ", replicó ella nuevamente con el aplauso del público.
Dakota hundida tras la gala/foto:telecinco.esDakota, destrozada
Una vez la gala hubo finalizado, los concursantes regresaron a sus correspondientes islas pero mientras todos cenaban, la de Alicante "no tenía ganas de nada". "Dako vamos a cenar lo que tu quieras", intentaba animarle Carlos Lozano. " Yo no quiero nada ", decía ella todavía entre lágrimas.
