El gallego se abre a contar su vida en el programa y no puede evitar derramar lágrima al recordar su infancia.
Uno de los momentos favoritos de esta edición de 'Gran Hermano 2024' es la 'curva de la vida' de los concursantes, ya que al ser concursantes anónimos, se desconoce su vida. Esta vez fue el turno de Edi, quien contó los aspectos de su vida más personales durante el programa de la noche del 20 de noviembre.
"Mi infancia ha sido muy feliz", comenzó contando el gallego. Sin evitar derramar lágrimas, el concursante continuó explicando emocionado: "Tuve la gran suerte de tener una familia que me dio unos valores muy buenos". Edi habló en especial de su padre: "Mi padre estuvo toda la vida en el mar, en casa estaba muy poco tiempo. Se rompía la espalda para darme la mejor vida posible. Me sentí siempre en deuda con él por estar fuera de casa para yo tener la mejor vida posible"."Cuando yo tenía 7 años ahí comienza una etapa complicada para mí", continúa diciendo. También quiso mencionar a su abuelo: "En esta etapa fallece mi abuelo con el cual estaba muy unido (...) desde ese momento siento que tengo un ángel de la guarda", dice entre lágrimas. Por otro lado, Edi habla también de su adolescencia: "Hasta los 16 me veía en el espejo y no me gustaba. Con 16 cambié físicamente".
La vida amorosa de Edi
A los 17 años, el concursante descubre lo que es el amor y a los 22 vive el "primer golpe en el amor". Por otro lado, el concursante cuenta que "siempre quise ser padre y es a los 31 años, que nace mi hijo Gael". "Empieza a cambiar mi vida, empiezo a sentir ese sentimiento profundo de darlo todo por mi hijo. Ahora que soy padre valoro lo que hizo mi padre por mí".
Por último, pero no menos importante, el concursante habla de Violeta, a quien ha conocido durante su paso en el programa y con quien se encuentra inmerso en un romance: "Me gustaría intentarlo con ella, quiero a violeta en mi vida. Me siento feliz", ha terminado de contar el concursante, algo que ha hecho sonreír con una sonrisa tímida desde el sofá de la casa de Guadalix a Violeta, quien estaba viendo la curva de la vida de Edi junto al resto de sus compañeros.