La primera prueba consistió en hacer un plato de pasta pero con diferentes tipos de esta así como con cocinados distintos por eso cada uno se volcó al máximo en lograr el mejor resultado. Hubo varios platos bastante malos pero, por desgracia, Cristina Cifuentes metió la pata del todo cocinando una lasaña en la que echó setas sin lavar, por lo que no se podía comer al estar llenas de tierra.
Por esta razón, los jueces decidieron expulsarla pero, echando la vista un programa atrás, hay que recordar que Cifuentes se ganó el delantal dorado que otorga la vuelta a las cocinas a la semana siguiente. Por eso, aunque la expolítica tuvo su expulsión normal con despedida y demás, tiene la oportunidad de volver a las cocinas de nuevo en el próximo programa.
Un abandono repentino
Entre ellos tres se encontraba el segundo expulsado de la noche pero cuál fue la sorpresa que antes de que los jueces dieran su veredicto Rubén Ochandiano dijo que se marchaba del programa. El concursante aseguraba que se lo había pasado muy bien pero que no había terminado de entrar en la dinámica del programa por lo que consideraba que lo mejor era marcharse en ese momento. Un fin de programa de lo más sorprendente.