Sánchez también asegura que, pese a haber vivido una supuesta situación de extremo peligro tal y como el propio Kiko Rivera lo cuenta, sus actos no parecen coincidir con estas presuntas amenazas: "No se llegó a bajar del coche y tampoco llama a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Si se hubiera sentido amenazado de verdad habría llamado a la Policía o a la Guardia Civil", y sentencia: "Para mí fue poca profesionalidad". Pero la cosa no se quedó aquí si no que la propia comisión de fiestas intentó hablar con el artista para aclara la situación pero, según cuenta, a la puerta del hotel solo salió a hablar con ellos "la seguridad privada y el representante".
"No se llegó a bajar del coche"
Pero la Presidenta de festejos no fue la única que habló con el programa de Telecinco sino que hasta 3 testigos contaron lo que allí se vivió y que dista mucho también de lo contado por Kiko Rivera: "El chico del coche le dijo que había llegado tarde y que si creía que en Asturias lo iban a matar y que no, que los asturianos no éramos así. A lo que le dijo: 'Pero deberías de llevar un par de hostias'. El resto de la gente gritaba, pero diciendo: 'Baja, hombre, que no te vamos a matar'", dice una joven reconociendo que si que hubo ciertas palabras groseras pero que para nada de la forma que contó el artista. Otra de ellas apunta también que, con la seguridad que acompaña al artista, haber solucionado aquel supuesto altercado en el momento habría sido cuestión de minutos sin suponer un peligro para nadie.