Rodríguez ha contado que la mayoría de los presentadores de la empresa dirigida por Paolo Basile tienen en común un requisito en la negociación de sus contratos. Se trata de una cláusula que les asegura que no se harán públicas imágenes de su pasado. "Los artistas viven de su imagen. Una cláusula que sí es habitual en este tipo de contratos es aquella que limita la posibilidad de emitir los programas durante un plazo en el tiempo", ha explicado él mismo.
"Esto se hace para que los propios artistas no vean como su imagen de hace años se pueda volver a ver en la televisión porque el tiempo pasa para todos y el contraste es evidente", añade haciendo referencia a que muchos de ellos no se sienten cómodos al ver sus imágenes pasadas. Este es el motivo por el que muchas veces no es posible poder ver programas con fragmentos de hace años.
No siempre se cumple
Sin embargo, a pesar de esta condición que exigen algunas de las grandes glorias de la cadena líder, muchos espacios televisivos utilizan la hemeroteca haciendo inevitable que se pueda ver a Jorge Javier Vázquez en 'Aquí hay tomate', a Mercedes Milá presentado las primeras ediciones de 'Gran Hermano' o a María Teresa Campos con unos añitos menos. Por lo tanto la cláusula citada queda convertida en una mera formalidad.