Pese a que la entrada de Kiko Rivera en 'Gran Hermano VIP' era el punto más fuerte de la noche del jueves, lo cierto es que los Chunguitos se han convertido en los grandes protagonistas del programa debido a su expulsión disciplinaria por sus comentarios homófobos y racistas.
Una vez en el plató, Jordi González les conminó a pedir perdón si de verdad estaban arrepentidos. El primero en hablar fue Juan: "Si hemos cometido algún error... nosotros tenemos muchos amigos gays y los queremos un montón y los respetamos muchísimo".
Por su parte, José ha señalado: " Queremos pedir a toda España y a todos los gays que nos disculpen de corazón, y si hemos cometido un error, que nos perdonen. No tenemos nada en contra de esta gente. Al revés, les queremos mucho".
Jose también manifestó que en el plató había un amigo suyo gay llamado Jorge, al que le pidió que se acercara y que le diera un beso en la boca. Jorge González le dijo que si tanto quería a su amigo ¿cómo había podido decir que prefería tener un hijo deforme que homosexual?.
Los Chunguitos, muy arrepentidos
"Los comentarios han sido desafortunados desde que tuvisteis un comentario racista contra Coman. Ha provocado el dolor, la vergüenza ajena... por todo eso esta empresa ha decidido que dejéis de concursar ", señaló Jordi Gónzález.
Los Chunguitos volvieron a manifestar su arrepentimiento y manifestaron que ellos no lo habían dicho a mala fe: "Nosotros no tenemos maldad y somos buenas personas. No tenemos nada en contra de los gays, ¡que vivan los gays! y que Dios los bendiga a ellos. Queremos pedir perdón, perdón y perdón".
Además, José se sinceró y habló de su propia familia: "Yo estoy casado con una mujer que no es de mi raza, no es gitana, y estoy locamente enamorado de ella. Tengo tres hijos a los que quiero con toda mi vida. Y si uno de ellos me dice que es gay, ¿qué voy a hacer? pues quererlo. Te lo juro que lo quiero. ¿Cómo no le voy a querer si es mi hijo?". Ante estas palabras, Jordi González aceptó las disculpas y les permitió que puedan ir a las galas.