El hijo de la Duquesa de Alba ha hablado a corazón abierto de cómo descubrió el fallecimiento de su progenitor y los dolorosos años que le siguieron.
Cayetano Martínez de Irujo no acostumbra a hablar sin ningún tipo de pudor ante los medios de comunicación. Por este motivo, ha sido una grata sorpresa el testimonio que ha ofrecido a 'Lazos de sangre', el programa de TVE que esta semana ha querido hacer un repaso por la vida de los hermanos Martínez de Irujo, los seis hijos de la Duquesa de Alba y Luis Martínez de Irujo.
Durante su entrevista no ha dudado en abrirse en canal ante los espectadores para contar El hijo de la Duquesa de Alba ha hablado a corazón abierto de cómo descubrió el fallecimiento de su progenitor y los dolorosos años que le siguieron.lo tormentoso que fue conocer el fallecimiento de su padre y los años posteriores. "Fue un vacío tan tremendo y, además, como no se nos dejó despedirnos de él incuso hice una terapia con la psiquiatra que me dijo: 'Tu padre no te ha abandonado'". Y es que, lo que se convirtió en un auténtico trauma para el hermano de Eugenia Martínez de Irujo fue el hecho de que ni su madre ni sus hermanos le informaran de la leucemia que padecía su padre y que, por lo tanto, no supiera de la misma hasta el mismo fallecimiento de Luis Martínez de Irujo. "Yo ahí me quedé huérfano, y el no poder despedirme de él, he tardado 40 año en resolverlo", ha confesado el penúltimo de los hermanos. De hecho, tal fue la situación que hace cinco años tomó la decisión de marcharse a Estados Unidos para internarse en un centro de trauma de infancia: "Allí me dio el porqué de las cosas y sobre eso he ido trabajando, y al menos me he reconstruido".
"Hablo con él todos los días y beso su foto todas las noches. Le doy las gracias, le cuento cosas y veo que no lo he superado porque creo que no se supera nunca", ha revelado el quinto hijo de la Duquesa de Alba. Afortunadamente, y tras someterse a los pertinentes tratamientos, Cayetano Martínez de Irujo es un hombre totalmente renovado que ha logrado por fin hablar de ello con su madre: "Mi madre me pidió años después perdón a Fernando y a mí por no habernos dejado despedirnos de mi padre". Una infancia de recuerdos
La vida quiso que ni Cayetano ni Eugenia Martínez de Irujo pudieran disfrutar plenamente de su padre, quien murió cuando ambos eran apenas unos niños. A pesar de ello, y de que sobre todo no pudieran compartir todos los momentos deseados, sí han sido capaces de rememorar sus recuerdos más nítidos con Luis Martínez de Irujo. Para la única hija de la Duquesa fueron las noches en las que le leía un cuento o el dulce que le daba todas las noches los únicos recuerdo de su padre, mientras que para su hermano Cayetano la pesca de la que disfrutaron juntos fue un momento inolvidable.