Después de muchos días detrás de él, Albert se satura de Marta y ella no lo entiende y llora desconsolada toda la noche.
Albert y Marta han tenido dos conversaciones muy diferentes por separado en 'La casa fuerte 2'. Y es que mientras que Marta tiene una conversación de lo más suave con Aurah sobre su relación con Albert, este último suelta 'lo más grande' de la que es su compañera de reality. Por lo que se puede decir que la pareja de concursantes no está pasando por su mejor momento.
Marta necesitaba desahogarse con el tema de su compañero y ha encontrado en su paisana Aurah la mejor de las maneras. La exconcursante de 'La Isla de las Tentaciones' contaba que "quiere muchísimo a Albert y que podría hacer la cucharita con él", pero sabe a ciencia cierta que no llegaría a enamorarse del catalán. "Es que yo casi no he estado tiempo sin pareja. Cuando empecé a disfrutar de la soltería estábamos medio confinados, ¡dime tú lo que he disfrutado de la soltería!", decía Marta para 'excusarse' de sus palabras.Pero por otro lado, Albert, que también le tiene mucho cariño a Marta y así se lo ha hecho saber, ha acabado harto de la canaria. "Estoy harto y saturado de Marta. Necesito que baje la intensidad porque ya no puedo más", le confesaba a Efrén. Y es que uno de los motivos por los que no puede más es por la "broma" que Marta le ha hecho poniéndole limpia cristales en el té, algo que no le ha hecho ni pizca de gracia al que fuese pretendiente de 'Mujeres y Hombre y Viceversa'.
La paciencia de Albert tiene límites
Pero la cosa no ha quedado ahí ya que Marta se ha enterado de lo que su compañero le ha dicho a Efrén y no ha dudado en reprocharle cada una de las palabras que había dicho. Sin embargo, Albert le ha confesado que "hoy" es cierto que está harto de ella y que debe entenderlo, aunque también le ha recalcado que la quiere mucho como compañera.
Desgraciadamente para Marta, la discusión no acabó ahí ya que siguieron hablando del tema durante unos minutos más. La canaria ha decidido meterse en la cama sin parar de llorar mientras que Albert ha preferido calmar sus nervios ojeando una revista antes de meterse en la cama.