Pues bien, la prueba consistía en subirse a una plataforma en el mar pero con escasa altura y enfrentarse a un compañero o compañera con un tridente al que había que conseguir tirar al agua. Los concursantes iban eligiendo quién participaba y, sorprendente, Carmen Borrego accedía a participar con una amplia sonrisa e incluso haciendo bromas ante el equipo contrario. Los aplausos del plató resonaban en playa.
Sin embargo, el programa se fue a una pausa publicitaria y cuando volvieron ya se presumía que la cosa no iba bien. Carmen Borrego estaba encaramada al borde de la plataforma negando con la cabeza. Cuando Carlos Sobera habló con ella se negó a participar: "Ni Carmen, ni San Carmen, ni la Virgen del Carmen. Yo ya he sobrepasado todo y esto no lo sobrepaso. No lo voy a hacer. No me voy a subir".
La única que se queda sin comer
Explicando qué es lo que le había sucedido, decía: "Cuando lo he intentado, he visto la altura a la que estaba y no. Nadie puede decir que no he intentado y superado cosas aquí, pero esto hoy no puedo porque no me encuentro bien, porque tengo muchísima ansiedad y no puedo ni respirar", concluía saliendo del agua. Como penitencia por haberse negado, fue la única concursante que se quedó sin comer, pues incluso los perdedores dispusieron de algo menos de tiempo para probar la pasta.