Él mismo fue el que se encargó en reconocer que era el concursante con peor base en la cocina: "Seguiré trabajando fuera y dando lo que pueda". Por otro lado, quiso agradecer al programa la oportunidad que le había dado: "Tienen un nivel altísimo y me gusta el formato porque es serio y real". De su plato se dijo que no se podía comer, además de que el jurado aseguró que le había faltado actitud.
La presión su falta de experiencia le jugaron una mala pasada, cosas que le hicieron fallar más de una vez. Parece que el nivel de esta temporada es muy alto y Silvia Abril se aventuró a decir de él que era el más débil, algo que resultó completamente cierto.
Una prueba solidaria
A pesar de que no se haya podido lucir y que no haya conseguido prosperar en las dos semanas que ha estado compitiendo, Carlos Baute sí que pudo disfrutar con sus compañeros de una prueba muy solidaria ayudando al Padre Ángel a dar de comer a los que más lo necesitan.