Según se ha desvelado en el programa de la tarde, Campanario tiene pensado interponer varias demandas a algunos de los colaboradores habituales del programa. Kiko Hernández ha sido el primero que, tras decirse esta información, ha confirmado que él va a ser uno de los que reciba este 'regalito' de la mujer de Jesulín de Ubrique. La que tampoco se libra de los dardos de Campanario es Mila Ximénez.
Haciendo honor a su carácter, la colaboradora no se ha callado ante esta noticia y ha dicho palabras vengativas y sin ningún miedo hacia María José Campanario: "Mira como tiemblo. En vez de ocuparos de nosotros tendrías que atar en corto a mamá, a papá, a tu cuñado Víctor, a Carmen Bazán, a tu tita... es lo que tienes q hacer. Que es lo que hace la gente normal con familias normales. Pero como tenéis un mercadillo abierto pues tenéis estos problemas. Yo me dedico a informar y nadie me va a cerrar la boca. Informar es mi trabajo y me ampara la ley y la constitución por la libertad de expresión".
Gema López ha querido aclarar que por el momento las demandas no están admitidas a trámite, por lo que es bastante extraño que la noticia haya salido a la luz. Precisamente por esto, ha comentado: "Se ha encargado ella a través de ciertos compañeros de filtrarlo. Pero ¿con qué intención?". Una vez más, se pone en duda que sea la propia Campanario la que dé la información a los medios.
El demandado más sorprendente
Que Kiko Hernández y Mila Ximénez vayan a ser demandados por María José Campanario no tiene nada de sorprendente, pero el tercero sí lo tiene. El propio Hernández ha sido el que ha querido llamar a dicha persona por teléfono antes de que se diera la noticia en el programa por si aún desconocía la noticia. El tercer objetivo de su demanda es José Antonio León, el reportero más conocido de 'Sálvame'. Siempre se ha visto que mantenía muy buena relación con Campanario y buena prueba de ello es la sorpresa que se ha llevado al enterarse: "Me he enterado ahora y me ha sorprendido, porque siempre la hemos tratado con respeto y le hemos tapado muchas cosas. Muchas no, muchísimas. Me siento, primero, sorprendido. Quiero hablar con ella para ver si es verdad, y si es verdad, darle la dirección de mi casa para que llegue la demanda".
Está claro que la demanda de la ha pillado desprevenido y asegura que van a cambiar mucho las cosas: "En el momento en el que yo confirme que sí, que la demanda es cierta, no tengo nada que ver con ella, rompo la amistad o lo que sea y entonces actuaré como periodista como tengo que ser, se harán menos favores y se le taparán menos cosas. Con favores me refiero al trato y la forma de trabajar".