El 17 de abril se estrenaba 'Homecoming', una película documental escrita, producida y dirigida por Beyoncé y distribuida por Netflix que gira en torno a la actuación de la artista en el Coachella Festival 2018. Festival en el que hizo historia por ser la primera mujer afroamericana de raza negra en ser cabeza de cartel.
Durante los 137 minutos de documental, que se describe como "una mirada íntima y profunda" de la cantante, Beyoncé se sincera sobre algunos aspectos íntimos de su vida como las dificultades a las que tuvo que hacer frente durante el su último embarazo, el de los mellizos Sir y Rumi. Este embarazo le obligó también a cancelar su actuación en la edición del festival de 2017.
Problemas en el parto
La artista recuerda con ilusión: "Me quedé embarazada de manera inesperada. Acabaron siendo mellizos así que fue mucho más sorprendente", pero revela haber sufrido preeclampsia, una enfermedad que se da durante el embarazo caracterizada por la presión arterial y que si no se controla, pueden poner en peligro a la madre y el feto.
" Cuando di a luz en junio pesaba 98 kilos ", decía la cantante explicando que no fue un parto fácil: " En mi vientre, el corazón de uno de los bebés se paró un par de veces, así que me hicieron una cesárea de urgencia ".
La diva del pop tuvo que hacer un gran esfuerzo para volver a estar al 100% para el concierto de Coachella menos de un año después. "Tuve que reconstruir mi cuerpo de los músculos rotos", confiesa, admitiendo que " Al principio tenía muchos espasmos musculares y, por dentro, mi cuerpo no se sentía conectado. Mi mente no estaba ahí, quería estar con mis hijos ". La cantante se muestra ahora totalmente recuperada y preparada para volver a los escenarios, pero admite que ha sido una etapa dura y que "Lo que la gente no ve es el sacrificio".