Durante la comida Bertín Osborne se lo estaba pasando estupendamente entre risas pero pronto empezó a notar que no se encontraba muy bien y dijo: "Perdóname, me encuentro fatal. Fatal de que me caigo redondo, no puedo más". Joaquín y su mujer le decían que no había problema, que cortara y se tumbara un rato, pero Bertín Osborne no sabía muy bien lo que hacer.
Algunos miembros del equipo se acercaron a él y le dijeron si quería un refresco y el cantante dijo que no quería nada pero que se encontraba fatal. Bertín Osborne explicó en unos totales lo que le ocurrió el día de antes: "La noche anterior estaba cantando en el Liceo de Barcelona malísimo, me inyectaron, me pusieron urbasón, tenía un gripazo horroroso y al estar hablando con Joaquín me empecé a encontrar mal mal que me desmayaba".
La entrevista no pudo terminar tan bien como se esperaba
Bertín Osborne tuvo que pedir al director de 'Mi casa es la tuya' que parara porque no podía más e "iba a pegar un petardazo". Preguntó si les quedaba mucho de grabación y Joaquín no dudó en decirle que terminara ya, que no había ningún problema. Pararon unos minutos la grabación y Osborne se recuperó un poco lo que le permitió terminar la entrevista, sin embargo esta no pudo finalizar todo lo bien que estaba previsto por la débil salud del presentador.