"Yo he contado mi vida. Lo que yo viví. Hay cosas de las que me arrepiento pero lo que he dicho siempre ha sido la verdad. No me contesta los mensajes porque se avergüenza. Si me pidiera perdón yo no le perdonaría porque lo más importante para mí ha sufrido y ante esa no hay nadie. Me parece muy injusto porque tú y yo sabemos lo que hay lo que pasa que no se puede hablar", decía la colaboradora en una charla con María Patiño.
Además, recordaba el momento en el que tuvo que tratarse de sus adicciones: "En el peor momento de mi vida los que estuvieron a mi lado fueron mi familia, él nunca levantó un teléfono por si necesitaba llevársela unos días. La gente no sabe tantas cosas que si yo contara y hablara...". También puntualizaba el profundo cariño que su hija tiene por Jesús Janeiro: "Ella quiere proteger a su padre porque lo quiere y a sus hermanos. Ella le quiere y a sus hermanos, pero no quiero hablar de ella".
Belén Esteban ha revelado que en una ocasión vivió un encuentro con Jesulín de Ubrique pero que tampoco fue para tanto la situación: "Yo me lo he encontrado. Nos saludamos educadamente y ya está". Tras esto, recalca que la familia de él tiene claro cuál es la situación: "No tengo absolutamente nada de lo que hablar. Él y los suyos saben lo que hay. Contesta. A esa la he parido yo pero es tuya. Aunque otras personas que están cerca de ti dicen que no, en la cartita. Ten cojones con quien los tienes que tener, no conmigo. Ante esa mato porque esa es la que me duele a mí. Entiendo que tú tienes cuatro pero yo tengo una".
Tiene claro que Jesulín de Ubrique no es feliz
Belén Esteban ha seguido hablando del asunto pero sin profundizar porque su hija no quiere que lo haga: "No quiero entrar en más porque sabes que hay una persona que no quiere pero toda la familia sabe lo que hay, lo que pasa que muchos se callan por miedo". Tras esto, Belén Esteban añadía: "Yo estoy muy contenta de que él vuelva a la tele. Si es lo que tiene que hacer, trabajar para olvidarse de muchas cosas porque le va a ayudar mentalmente" .
Lo más fuerte venía cuando aseguraba que el torero no es feliz: "Es un desgraciado. Él vende una felicidad que no tiene y yo no necesito nada. Yo solo necesito que en vez de tres sean cuatro. Hay algunos que no tienen oficio ni beneficio y se les da todo. Hay una que tiene una carrera que se ha ido muy lejos porque no es periodista como se publicó en una revista, está haciendo prácticas, y no quiero hablar de ella porque me regaña, pero bien orgulloso tenía que estar. Cuando a un hijo le compras algo, si tienes cuatro al otro también. La gente de la familia no habla por miedo", concluía.