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Parece que aquello de "no te fíes ni de tu sombra" es una máxima muy extendida por los pasillos de Telecinco. Si hace pocos días se ponía en entredicho la lealtad de Gustavo González por supuestamente vender unas fotografías de Kiko Hernández, su compañero de 'Sálvame', ahora ha sido María Patiño la que ha sido acusada de traicionar a uno de sus amigos más íntimos: Jorge Javier Vazquez.
Fue Diego Arrabal el que dejó caer que la periodista había revelado a varios paparazzi dónde estaba pasando el presentador catalán sus vacaciones de verano, para que pudieran hacerle fotografías y repartirse las ganancias. Patiño no estaba en ese momento en el plató de 'Sálvame' y la impotencia de no poder defenderse se apoderó de ella. "Ayer estaba mordiendo las paredes de mi casa", apuntó la conductora de 'Socialité'.
Por fortuna para ella, una buena amiga estaba dispuesta a defenderla con uñas y dientes y negó con contundencia que Patiño hubiera filtrado ninguna información que pudiera afectar a Jorge Javier. Haciendo gala de las formas que la caracterizan, la de San Blas se levantó de su silla para mostrar ante todos los espectadores la confianza plena que tiene en la tertuliana. " ¡Si me tengo que cortar la cabeza por ella, me la corto! ", confirmó la princesa del pueblo sin titubeos.
No necesita a nadie
Ya de regreso en el plató, María Patiño ha dado las gracias a todos los compañeros que la han apoyado, pero asegura que ella puede protegerse a sí misma. "Hay gente que me quiere respaldar y les he dicho que aquí doy la cara yo sola, porque todavía creo que tengo la capacidad de defenderme", sentenció la periodista. Del mismo modo, asegura que tiene pruebas que corroborarían que no ha vendido a su amigo, pero que no las va a enseñar porque "no le da la gana". A la colaboradora se le llena la boca asegurando que nunca ha traicionado "absolutamente a nadie" y que no colabora con ninguna agencia de prensa, a pesar de tener varios amigos que trabajan como paparazzi. En cualquier caso, la integridad de la tertuliana se ha visto cuestionada y esto puede jugarle algunas malas pasadas, porque como ella misma afirma, vive de su reputación.