Sentada ante Santi Acosta en su casa de Marbella, Bárbara Rey ha concedido la que para ella es su entrevita más sincera en toda su vida. ' Bárbara Rey, mi verdad ', el programa especial de 'De viernes' prometía ser la respuesta a todo lo que su hijo Ángel Cristo había sacado a la luz de ella en el último año con la venta de las fotografías con el Rey Juan Carlos I y las grabaciones que ella misma le había hecho al Rey Emérito sin su consentimiento durante sus años de relación. En un repaso por sus 75 años de vida, la conocida vedette ha narrado otros oscuros episodios.
El locutor de radio
Cuando todavía era María García García y no bebía aún de las mieles de la fama vivió uno de los primeros episodios de abuso y acoso por parte de personas de gran poder: " Una vez un locutor de radio que tenía un programa muy importante y que tenía mucho éxito. No puedo decir el nombre. Yo tenía 19 años ". Por aquel entonces todavía pasaba ciertas penurias para sobrevivir en la capital y se topó con este hombre en plena Gran Vía y le pidió dinero para comprar un bocadillo de calamares: "Él dice que sí, pero que tengo que acompañarle a su casa porque no lleva dinero encima ", y le acompaña.
Ya en su casa, a la que fue sola sin la compañía de su amiga, ocurrieron los hechos: " Al llegar cierra la puerta por dentro y me empieza a forzar. Tuve que huir de él, le tuve que pegar, él me pegó a mí y, como pude, me fui de su casa llorando y sin las diez pesetas", recuerda. Quién fue este presunto abusador no quiere decirlo, pero si da algunas pistas: " Es una persona con la que se es muy considerada y creo que todavía está vivo. Tenía por ahí un sombrero que me dieron una vez en, no sé si era una fiesta, un programa, no me acuerdo bien, pero ya no lo tengo".
El director de cine
Ya trabajando como actriz de cine del destape, Bárbara Rey sufre otra situación de acoso y abuso: "En el cine me pasa cuando me consiguen una película con un productor y un director famosísimo, muy importante, y la película se rueda en Marbella ", y el hombre en cuestión era el director. Recuerda que todo ocurría durante las cenas después del rodaje cuando aprovechaba, delante de todo el mundo, para sobrepasarse con ella: " Cuando podía metía mano, me cogía un pecho, me metía mano por debajo cuando estábamos sentados a la mesa, por debajo de la falda...".
Para evitarlo, la vedette asegura que un día decidió no ir a una de esas cenas para evitar que volviese a pasar esto, en cambio la cosa fue muchísimo peor: " Este hombre se presenta en nuestro apartamento, se mete en la habitación, intenta tocarme, besarme y violarme, y yo me tuvo que levantar de la cama y echarlo". Tras esto decidió abandonar la película: "Me dieron mil pesetas, me cogí un avión y me vine para Madrid".
De él tampoco va a decir el nombre pública por respeto "al cine español" y también "por su hija", pero de nuevo desliza datos que podrían dar algunas pistas: " Ese hombre ha sido siempre respetadísimo, tiene además un Goya ". La razón porque la que, pese a ser la presunta víctima, no ha querido dar los nombres no es otra que el puro machismo que ha sufrido en sus propias carnes a lo largo de su vida: " No voy a decir su nombre porque yo siempre sería la mala como he sido siempre. La mala, la golfa, la peor y yo me invento las cosas y yo miento, entonces no puedo hacerlo ".