En la segunda parte de 'Bárbara Rey, mi verdad' la protagonista comenzaba respondiendo a todo lo que se dijo de ella tanto durante la emisión como en los programas de Telecinco que se emitieron posteriormente demostrando así que esta segunda entrevista centrada en Ángel Cristo hijo se grabó después de es lunes 9 de diciembre. "Estuve muy mal la noche en donde lo estabais emitiendo porque hubo un montón de cosas que me parecieron muy injustas, pero eso ya es un problema de los colaboradores".
Para la vedette lo que se dijo en el plató de Telecinco durante la emisión no fueron más que "ataques muy feos, muy desagradable y con mucha maldad y mucha mentira", sin reparo alguno a señalar cuales. Juan Luis Galiacho y Ángela Portero aseguraron que Bárbara Rey mintió sobre cómo llegó a Madrid, que lejos de hacerlo en compañía de su padre para cumplir su sueño lo había hecho gracias a Peret, quien le había alquilado un piso en la capital: " Eso es, lo primero, mentira y, lo segundo, llamarme prostituta ", dirigiéndose especialmente contra la periodista: " Y se lo apostilló la Portero, toda ella encantadora, muy guapa, muy bonita, muy simpática, muy creíble. Es muy cómodo desde un plató en el que tú no estás el machacarte".
"Portero, toda ella encantadora, muy guapa, muy bonita, muy simpática, muy creíble" | Foto: Telecinco.esY es que la tanto Ángela Portero como Sandra Aladro -y la asuente Paloma García Pelayo, ahora colaboradora de Antena 3- tienen relación con otro enemigo en la sombra de Bárbara Rey, Álvaro García-Pelayo, exmarido de Portero, ahora marido de Aladro y hermano de Paloma, quien es el actual representante de Ángel Cristo y del que se dice que ayudó a vender las famosas fotografías de Bárbara y el Rey Juan Carlos besándose a la revista Privé: "Diga lo que diga la Sandra esta, Aladro, puede ser toda la historia de España que tú quieras, puede ser historia que yo he podido chantajear al Rey, pero que salga a la luz, no. Puede ser historia que yo le he grabado y he hecho fotografías, pero no que tú las utilices para tú llevarte un porcentaje con tu marido que es el que representa a mi hijo ".
"...no que tú las utilices para tú llevarte un porcentaje con tu marido que es el que representa a mi hijo" | Foto: Telecinco.esDe Alessandro Lequio, en cambio, poco más quiso decir que criticar que todo lo que dijo durante el programa lo hizo gritando: " A ver si pones orden, Santi, que se ponen a gritar como locos. El Lequio como grita, que se cree que por razón tiene más razón ". Y es que el italiano criticó de la vedette que hablase de haber sufrido abusos de un locurtor de radio y un director de cine muy famosos sin dar su nombres, lo que para él era tirar la piedra y esconder la mano. No así para Bárbara Rey: "Yo no voy a decir ningún nombre. Ellos que son tan listos, que lo digan ellos. Si lo que les satisface es que yo me meta en problemas no lo van a conseguir. Ni con este señor ni con mi hijo ni con nadie ".
"El Lequio como grita, que se cree que por razón tiene más razón" | Foto: Telecinco.esTambién respondió a Javier Sardà, ahora colaborador de 'TardeAR', quien en el propio plató tachó a Bárbara Rey de "putilla" por el episodio que ella misma contó de que el Rey Juan Carlos le dejó quinientas mil pesetas en la mesilla de noche en una ocasión tras tener relaciones sexuales para que pudiera viajar a Alemania a ver a su hermana: " Parece ser que lo más grave que se le puede decir a una mujer es que es puta cuando hay tantísimas cosas peores ", reconoció la vedette.
Ante todo esto panorama, Bárbara Rey acabó esta primera intervención lanzando un claro mensaje a todos ellos: "Les quiero decir a estos colaboradores que yo no voy de víctima. Yo soy víctima de muchos hombres en mi vida, de mi marido, de mi hijo, pero el que yo sea víctima no quiere decir que yo me considere tal ".
La respuesta de Sandra Aladro
Sin duda la respuesta más esperada era la de Sandra Aladro, no solo por alusiones a ella, sino también a su actual marido: " Esto no es una cuestión de porcentajes, es una cuestión de periodismo. De una manera rotunda y definitiva le hemos puesto nombre y apellidos a un chantaje que ella había negado durante 30 años con datos, testimonios e información veraz y que, gracias a ese trabajo, no ha tenido más remedio que confirmarlo ", sentenció la periodista.
