Antonio Resines nunca defrauda. Cada una de sus entrevistas son una auténtica aventura y en esta ocasión no ha sido menos. El intérprete ha sido uno de los invitados de la novena temporada de 'Mi casa es la tuya' y, a pesar de que siempre se ha mostrado especialmente reacio a hablar de su vida privada, ha aprovechado la visita que Bertín Osborne le ha hecho a su casa para desvelar algunos de los episodios más alocados que han marcado su vida.
Uno de ellos tuvo lugar cuando apenas acababa de entrar en la universidad para estudiar Derecho en la capital. "Hacíamos manifestaciones en las que gritábamos al Rector y encabecé una", ha comenzado contando Antonio Resines, para inmediatamente añadir: "Y se nos ocurrió ir secuestrando un autobús diciendo que íbamos a Plaza Castilla". No obstante, lo que ellos no sabían es que la Policía ya se había dado cuenta y de que fueron ellos quienes les dejaron encerrados en el interior del autobús.
"Acabamos en la DGS, nos ficharon y me cayó una multa. Mi padre no murió de milagro porque cien mil pesetas eran una barbaridad ", ha comentado el actor ante un sorprendido Bertín que no podía parar de reír. Este suceso provocó que antes de empezar el servicio militar obligatorio él ya contara con antecedentes penales que afortunadamente al término de la Dictadura franquista le fueron eliminados.
Así empezó en el cine
Inmediatamente dejó la carrera de Derecho y se metió a estudiar Ciencias de la Información, concretamente todo lo que tenía que ver con el campo audiovisual y, sobre todo, el de la producción. Y es que, él revela que en un principio no soñaba con ser actor, sino con dedicarse al ámbito de la producción. Sin embargo, en aquella misma época coincidió con otros grandes como Óscar Ladoire o Fernando Trueba, quien finalmente le daría su primer papel en el cine en el filme 'Ópera Prima'.