Poco a poco la figura de Ángel Garó se va despegando de la turbulenta y polémica aura que le perseguía desde los últimos días. Desde que saltase a la luz el caso de malos tratos que supuestamente protagonizó el humorista junto a su expareja, no han parado de saltar a la luz diferentes testimonios que provienen de amigos, familiares y exnovios en los que se asegura que el comediante tiene un difícil, agrio y complicado carácter.
El 26 de mayo fue cuando esta noticia acaparó los titulares de la prensa rosa, desde entonces el gaditano ha participado en un juego con Telecinco en el que ambas partes salían beneficiadas. En un principio parecía que Ángel Garó detestaba los programas de corazón de Mediaset pero, poco a poco, el humorista ha ido sacando partido al acudir a programas de televisión como 'Sábado Deluxe' o 'Viva la Vida'.
El último beneficio que ha decidido sacar el protagonista de toda esta historia ha sido su nuevo contrato con La Fábrica de la Tele. La productora encargada de sacar adelante el programa vespertino de Telecinco ha decidido fichar al comediante cada jueves en su nueva sección '¡Yo soy el señor Ángel Garó!'. En este espacio, que se estrenó el pasado jueves 13 de julio, se pudo ver al humorista intentando ganarse el cariño del público con sus chistes.
Pero no solo quiso arrancar las carcajadas a la audiencia. Nada más empezar su sección, Ángel Garó se subió al escenario y lo primero que hizo fue hacer chistes inocentes y graciosos con las características de la personalidad de cada tertuliano. Según fueron pasaron los minutos, el estrenado colaborador cambió su monólogo y decidió reírse de sí mismo. Fue entonces cuando definitivamente consiguió que tanto el público como sus nuevos compañeros le alabasen con risas y aplausos.
La esperada batalla
El encuentro más esperado se produjo cuando la sección terminó y Ángel Garó tuvo que verse cara a cara con Paz Padilla. Hay que recordar que el pasado 8 de julio el gaditano entró por teléfono en 'Sálvame' y descargó toda su rabia contra la presentadora del programa. El público todavía recordaba este encontronazo y estuvo muy atento a cuando la sustituta de Jorge Javier Vázquez compartió plano con el humorista. Paz Padilla decidió no andarse con rodeos y le declaró: " Mira, se cuestionó mi trabajo, se cuestionó el programa y ahora te vemos aquí sentado ".
El aludido prefirió seguir con su sentido del humor para no cortar la buena energía que había en el plató y entre varias sonrisas le respondió a la presentadora: "Mira Paz, te voy a decir una cosa. Es muy duro ver a tu familia sufrir. En este caso mi familia no es mi abuela ni el pseudo tío que tengo, ni por supuesto la chica esa tan elegante con una gran distinción. Me vas a disculpar, sé que fui duro pero mi madre me llamó llorando, mi hermana descompuesta tomando ansiolíticos y eso me hizo ser el niño del exorcista. Nunca mejor dicho, discúlpame". Al escuchar estas palabras, Paz Padilla aceptó el perdón y los dos se fundieron en un abrazo.