Ana Obregón ha contado a Bertín Osborne cómo vivió el momento más doloroso de su vida: la enfermedad y muerte de su hijo Álex Lequio. La presentadora se enfrentó a la noticia más dura con mucha entereza delante de su hijo, pero viniéndose abajo en sus momentos de soledad. El joven fue diagnosticado con sarcoma de Ewing, un cáncer que solo se da en niños y gente joven y que es muy agresivo. Para tratarlo se marchó con él a Estados Unidos y no se separó de su lado en los siete meses que estuvieron en Nueva York y en los posteriores que pasaron en España antes de morir.
Ana Obregón hablando con Bertín Osborne en 'M casa es la tuya'/ Foto: telecinco.esLa estancia en el país americano fue muy complicada, y aunque Alessandro Lequio, el padre de su hijo, estuvo con ellos al principio, tuvo que marcharse para volver al trabajo. Mientras tanto estuvo alojada en diversos hoteles, pero una vez superado el plazo de tres semanas se tenía que marchar de dichos alojamientos, para buscar uno nuevo según las normas allí establecidas.
Ha sido recordando el inicio de su enfermedad y los momentos tan complicados que pasaron en Estados Unidos cuando ha sacado a relucir la que sin duda alguna fue una de las frases más duras que Álex Lequio le dijo a su madre. La presentadora ha dicho a Bertín Osborne en su entrevista: "¿Sabes qué me llegó a decir? 'Mamá, perdóname por tener un hijo defectuoso'", y ella ha roto a llorar, muy afectada.
Primera fotografía de Álex Lequio, junto a sus padres, tras conocerse la enfermedad que padecePero incluso hubo un momento en el que no perdieron la esperanza, cuando llegó una buenísima noticia. Al finalizar el tratamiento, el tumor se había reducido en un 90%, no obstante, con el tiempo volvió a reproducirse y se convirtió en algo irreversible. Volvieron a España y Lequio siguió con su tratamiento en Barcelona, lugar donde recibía sus sesiones de quimio.
Orgullosa de su hijo
La presentadora ha relatado en esta entrevista no solo una de las frases más dolorosas que su hijo le dijo, sino otra que llenó su corazón a pesar de que estuviese en el momento más complicado de su vida. Alessandro Lequio, su padre, estuvo con ellos todo el tiempo el último mes y un día Álex Lequio comentó: "Merece la pena estar así por veros a los dos juntos". Y es que para él era un soplo de aire fresco ver a sus padres unidos por él y por luchar por su recuperación. Ana Obregón ha dejado claro que quiere que la gente sepa cómo era su hijo hasta los últimos días de su vida, una persona luchadora y sonriente. "Quiero que la gente sepa lo fuerte y lo valiente que fue hasta el final", añadió la actriz.
