Tras escuchar todo lo que se dijo sobre ese día en los diferentes programas de Telecinco, la diseñadora asegura que la versión contada por Isabel Rábago era bastante acertada, algo que le hace espetar la acusación más fuerte de su entrevista: "Está muy bien informada. De mí no es, de mi marido tampoco porque con ella no habla, sería de la otra persona que estaba allí", decía señalando directamente a Gloria Camila como la informadora de los diferentes colaboradores.
Minutos más tarde, era la propia Isabel Rábago la que se ponía en contacto con el programa para desmentir que fuera la hija de Rocío Jurado la que le contó los hechos. Ana María Aldón insistió en que su marido no podía ser y también puso en duda que fuera la amiga de Gloria Camila que allí se encontraba, ya que asegura que desde donde estaba -en la cocina- no podía escuchar la discusión en cuestión, que tuvo lugar en "el dormitorio donde yo duermo, de mi casa, de la casa de mi marido".
Ana María no sabía que Ortega Cano había vuelto a Madrid
Ana María Aldón no quiso entrar en detalles sobre cómo se originó o qué se dijo en la famosa discusión, simplemente aseguró que la primera en irse fue ella, no Ortega Cano como se había dicho: "Sabía que había prensa detrás y no quería montar ningún numerito. Me fui al super a comprar algo aunque sea tarde. Luego vuelvo a casa, pero no subo a la casa", reconoce, no queriendo así compartir espacio ni con su marido ni cola hija de este: "Ellos seguían dentro y una amiga de Gloria. Esa amiga estuvo abajo hablando conmigo y yo no volví a subir. Lo que hablé con mi marido fueron 30 segundos y me fui".