Una postura que la ha puesto contra la espada y la pared en más de una ocasión, sobre todo cuando en 'Viva la vida' confesó que "no me extraña" que Rocío Carrasco no respondiese a las llamadas telefónicas de su hija Rocío Flores ya que "si ella está mal, está a tratamiento y si no se encuentra capacitada en ese momento para coger el teléfono, no sabe como va a responder como va a reaccionar, lo entiendo también". Unas declaraciones que parecían desmarcarla de la opinión del resto de la familia, que parecía estar más posicionada hacia el lado de Rocío Flores.
Ahora, una semana más tarde de estas palabras, la que fue concursante de 'Supervivientes 2020' ha quería dejar clara que su única opinión es que le gustaría que madre e hija entierren el hacha de guerra y esto se termine de una vez por todas. Mientras tanto, intenta entender el dolor por lo que ambas pueden estar pasando: "Rocío Flores me da una pena tremenda. Le veo la cara y lo que tiene que estar pasando... si lo estoy pasando mal yo, no me quiero ni imaginar como lo pasa ella", decía de la pequeña.
"Solo deseo que se arreglaran las cosas"
Por ello, verbalizaba cuál era su único deseo: "Yo puedo entender a Rocío Carrasco, por supuesto, pero también entiendo a su hija. Solo deseo que entre madre e hija se arreglaran las cosas y pudieran tener un acercamiento. No voy a tirar piedras en el tejado de nadie".