Ana María Aldón se ha sometido a un complejo ejercicio de hipnosis en 'Fiesta' con el que ha revivido los momentos más duros de su pasado descubriendo así partes de ella hasta ahora desconocidas. El primero de los recuerdos fueron los malos tratos que tanto la diseñadora como su madre y sus hermanos sufriendo en manos de su propio padre. "Lo he vuelto a vivir con el mismo dolor físico, el emocional viene después. Eso fue lo que más me impactó. Ese dolor que te escuece", decía días después ya en el plató del programa.
" Yo puedo ir hasta los 2 años ", reconoce sobre los primeros recuerdos que tiene de su padre agrediéndola: "Pesan tanto esos recuerdos. En ese momento la protección era meterme debajo del colchón. Es tan doloroso que evitamos hablarlo los hermanos". Durante la hipnosis, que Ana María Aldón vivió como si fuera una película de su vida, esta también pudo reconciliarse de cierta manera con su pasado y con el recuerdo de la figura de su padre: "Que le perdono, que me deje vivir, que no me torture más. No merecía a mi madre. Ninguno lo merecíamos. Ni gritando, no quiero que me grite nunca más", decía ante la figura de su progenitor.
Ana María Aldón, destrozada al volver a verse en hipnotizada | Foto: Telecinco.esOtras de las regresiones fue años después, siendo todavía una niña, cuando se convirtió en madre de su hija Gemma cuando tan solo tenía 17 años : "Estoy sola en el hospital. Me siento mal, mal, mal, la niña está mal porque tenía un soplo en el corazón. Estoy sola porque no me puedo ir a mi casa. El papá de Gemma está en su casa. Mi familia no vino a verme, no vino nadie. Yo toda la noche despierta esperando a la niña, que no venía, no me la traían. Dice la doctora que no sabe si la niña va a sobrevivir ", decía durante la hipnosis.
El parto de su hija Gemma: "Fue otro trauma más gordo"
"Ese fue otro trauma muy gordo", decía por primera vez públicamente Ana María Aldón, quien aseguró que ni su hija Gemma sabía de lo difícil que fue para ella aquel momento de su vida: " Yo esperaba que viniese mi madre, mis hermanas... yo tenía 17 años (...) Mi madre, estoy segura de que le hubiese gustado estar a mi lado, pero mi padre todavía estaba vivo y no le era posible ir al hospital. El padre de mi hija estuvo la noche del parto, pero luego yo pasé muchas noches en una silla de un hospital".
Tampoco fue fácil volver a los primeros años de vida de su segundo hijo, ya con Ortega Cano. Cuando este tenía tan solo un año, el torero ingresaba en prisión, quedándose de nuevo sola tras ser madre: " Otra vez sola con un niño. Con los dos, ahora. El padre está en Zaragoza. Se repetía la historia ", decía Ana María Aldón durante la hipnosis. A pesar de que la situación era muy diferente a su primera maternidad, el sentimiento de soledad era muy parecido para ella causando un gran sufrimiento para ella.
La diseñadora recuerda que con un niño de tan solo un años se mudó a Zaragoza a un hotel para estar más cerca de su marido, pero que la alejaba todavía más de su familia, también de la política. Los 3 primeros meses, recuerda, estuvo con ella su hija Gemma, por aquel entonces de 18 años, pero de nuevo siendo madre soltera. " Yo en el parto estuve muy acompañada. Las situaciones no se pueden comparar, pero me volvía a ver sola con un niño de 1 año y sola ", aseguraba.
