'En el nombre de Rocío', la nueva serie documental de Rocío Carrasco ha comenzado ya emitirse y en los primeros episodios ha lanzado ya los primeros dardos a su familia más mediática. Horas más tarde, el primer miembro de esa familia en colocarse delante de las cámaras era Ana María Aldón, mujer de Ortega Cano. La colaboradora de 'Viva la vida' lo hacía con el comodín de la salvación de la propia hija de Rocío Jurado, quien la había dejado fuera la nueva guerra familiar que estaba a punto de empezar.
A pesar de que durante el episodio cero se menciona también a la Ana María Aldón como uno de esos miembros de la familia mediática que ha conseguido trabajo en televisión gracias a la exposición mediática de la familia de Rocío Jurado, Rocío Carrasco le daba el beneficio de la duda: " Es una chica con la que no tengo ningún tipo de relación ni la he tenido y por tanto no la voy a meter en esta familia. El resto están ávidos y expectantes porque saben que esto les va a reportar beneficio", era las palabras durante el episodio.
Nada más arrancar el sábado 18 de junio el programa de 'Viva la vida', Ana María Aldón, a diferencia de ocasiones anteriores, se reconocía distante a la opinión de Rocío Carrasco porque sus vivencias no se asemejaban para nada con lo que había escuchado: " Yo conozco a esa parte de su familia desde otra perspectiva y no puedo apoyarla. No tengo ese concepto de ellos".
Ana Mariá Aldon, todavía dolida por el amor de Ortega Cano y Rocío Jurado
En cambio, la que fuera concursante de 'Supervivientes 2021' si reconocía que el comienzo de la emisión no estaba siendo fácil para ella porque también le había removido y le estaba haciendo pasar un momento complicado en su vida. La colaboradora aseguraba que no era directamente por volver a estar en el punto de mira, sino porque sí que había hecho un paralelismo entre las declaraciones de Rocío Jurado y se sentía bastante dolida: "Son muchas cosas pero estoy respirando y estoy viva a pesar de que tenga que dar explicaciones... Así que tirando. Hay cosas detrás que no se saben, cosas cotidianas que no tienen que ver con Ortega Cano pero que sí afectan de manera directa en la salud mental y esas ganas de tirar para delante ".
En concreto era la siguiente frase: " Mi madre se murió enamorada de Pedro Carrasco ", a pesar de, por aquel entonces, estar ya casa con Ortega Cano. Ana María Aldón reconocía que esto podía ser doloroso para su marido, pero su respuesta dejó a mucho boquiabiertos: " No sé lo que pensará mi hijo cuando vea a su padre decir que el amor de su vida ha sido Rocío Jurado ". Unas palabras con las que dejaba claro que, si hay que tener empatía con Ortega Cano por las palabras de Rocío Carrasco, este también tenía que tenerlas con su propia familia cuando pronunció esa frase.