"Mi paso de la casa me ha dejado un poco tocada, la otra vez cuando salí ya, se acabó, gané y ciao, pero esta vez que estaba dentro yo viví unas cosas muy fuertes y ahora que estoy fuera puedo ver el 24 horas, puedo ver el twitter, pero no puedo hablarles, no puedo hacer nada entonces tengo la sensación de que que he dejado algo a medias", confesó la ganadora de 'Gran Hermano Vip 5' en el programa 'MorninGlory'.
"Tengo envidia de ellos por estar en la casa, tengo celos por que ha entrado Miriam, llevo cuatro días en mi casa en la verdadera mierda con la manta en el sofá muy rayada por la vida. Se que 'Gran Hermano' es un mundo inventado, no es real, entonces al haber vivido cosas y tener sensaciones y emociones reales por algo que no existe de verdad, tu mente hace como '¿qué está pasando?'", contó la actriz.
Futuro incierto
La intérprete de 'La que se avecina' ha anunciado que tiene muchas ganas de que el gallego salga para hablar con él fuera y que no quiere que los medios están pendientes para que todo sea natural. De la misma manera asegura que lo que siente por el de Pontevedra es real y no está tratando de crear una carpeta como le han dicho en las redes sociales. A pesar de su ilusión, Eckmann sabe que las relaciones no soy igual dentro y fuera del reality, algo que aprendió gracias a su affaire con Antonio Rafaski ('Big Brother Brasil') por lo que no sabe a ciencia cierta que pasará con Rubén.