Un sincero Alonso Caparrós comenzaba su relato dejando impactado incluso a Jorge Javier Vázquez, que en más de una ocasión tuvo que parar para coger aire y continuar con la entrevista. Caparrós explicó: "Empecé a consumir cocaína a los 17 años. Siempre he sido un tío rebelde y de no prestar atención nada más que a mí. No sé por qué me enganchó de esa manera, no tengo ni idea, me atrapó de muy mala manera". Además, añade: "Recuerdo que soñaba, y además de manera feliz, con montañas de cocaína".
El que fuera presentador de 'Furor' continuó sincerándose en la entrevista: "Lo malo de la cocaína no es en sí la resaca, son los días. Días antes ya tienes el objetivo, aún haciendo vida normal. Tenía que hacer un programa y mi objetivo no era hacerlo sino terminarlo pronto". "Consumía lo suficiente como para matar a siete caballos, no había fin hasta que mi cuerpo no podía más. Al principio uno resiste más pero, según pasaba el tiempo, tu cuerpo se va rindiendo", añadía.
Su familia, su gran apoyo
Además, el presentador relataba como había visto a su hermano llorar de impotencia a su lado en el coche después de irle a recoger o a su por aquel entonces mujer, que se le saltaban las lágrimas al intentar impedirle que bajara al bar de debajo de su casa a comprar droga. Caparrós añadía: "Viendo a mi familia nadie está en la obligación de soportar lo que no puede, es muy duro estar detrás de la persona que quieres y que no te haga caso".
La muerte, pisándole los talones
El presentador ha confesado que durante su gravísimo problema ha sentido cerca la muerte en tres ocasiones: "La primera fue en un hotel donde estaba yo solo, era una imagen muy triste. Estaba bastante pasado, desnudo delante del espejo, y presentí detrás de mí algo que me decía que me iba a morir". Otra de las ocasiones que comenta fue que después de que su familia le recogiera en coche él sentía que se iba para siempre.
Al llegar a su casa le tumbaron en la cama y sentía como todo se cerraba a su alrededor y escuchaba como su madre llamaba a todos sus hermanos para que fueran corriendo a su casa, como si de verdad se fuera a morir. Caparrós lo dice claro: "Pensé mucho tiempo que me iba a morir joven". Pero por fin ha logrado superarlo y está feliz con su nueva pareja y limpio, por eso ha decidido contarlo: "Me ha costado tomar la decisión de sentarme y contarlo pero tenía ganas de dar carpetazo ya a esto".