La capilla ardiente de María Jiménez se ha instalado en el Ayuntamiento de Sevilla y hasta allí se están desplazando todos los que la querían. Su hijo ha atendido amablemente a 'Ya es mediodía' y ha contado cómo se encuentra en este momento: "Ya habrá tiempo para estar emocionado en otro momento. Por eso estamos tan enteros, hay que atender a mucha gente".
Alejandro Jiménez ha explicado que los últimos momentos de su madre no fueron complicados porque apenas se enteró: "Los últimos días no se ha enterado porque estábamos en Chiclana. De repente vio que no le funcionaba bien la pierna, fuimos al médico y dos días después estaba reventada por dentro. Era una enfermedad incurable. No ha sufrido, ha tenido una muerte digna".
A su lado hasta el final
"Su día a día era muy tranquilo, salía a comer, estar en casa, se veía documentales, estaba con los nietos. Tenía una edad que con sus rutinas pues estaba cómoda", contaba sobre su madre. Por último, ha hablado sobre la gente que ha acudido a despedirse de ella: "Hay gente que no veo desde hace mucho tiempo que vienen y reconforta saber que todo el mundo la quería. Está uno feliz, se queda uno tranquilo. No sé si ella estará cabreada de estar ahí tanto rato pero vamos a intentarlo", concluía tirando de humor en este momento complicado.