Una espina clavada
Alejandro Jiménez contó que se enteró de que se había muerto por la televisión, pero que su padre no le llamó en ningún momento para avisarle de que se estaba muriendo. ''No entiendo por qué te estás muriendo y no avisas a ninguno de tus hijos. No sé la sensación que tienes que tener en tu cuerpo para morir solo acompañado de tu señora'', comenzó diciendo el hijo de Pepe Sancho.
Una noticia que le llegó de forma inesperada y que hizo que Alejandro Jiménez no supiera si ir a su funeral, ya que no tenían ninguna relación. Finalmente, decidió ir, ya que pensó que si no lo hacía se podía arrepentir. "Lamenté el no haber podido estar con él los últimos seis años", dijo Alejandro Jiménez antes de contar lo que hizo cuando supo que su padre quería desheredarle. "'Le mandé un mensaje y le dije 'métete tu herencia en los cojones, no la quiero, no quiero nada tuyo'. No me arrepiento de que no me haya dejado más herencia'', añadió.
Aun así, es su padre y con el tiempo Alejandro Jiménez ha ido perdonándole, incluso admitiendo que tiene una espina clavada por no haber pasado tiempo junto a él. "Me hubiera quedado decirle 'Oye papá que yo no soy el culpable, reconócelo, reconoce tu error, yo no te he querido joder la vida'', dijo el hijo de Pepe Sancho en la entrevista.