Aitor Trigos ha relatado en 'Sálvame Deluxe' al detalle su vida dentro del mundo de la prostitución tras abandonar la televisión obligado hace varios años. El presentador le confesó a María Patiño datos como los precios que cobraba: desde lo más bajo, 50 euros, hasta 5.000 euros que ha sido lo que más ha ganado durante una fiesta como ha asegurado "en una casa de un jeque en París, con drogas y otros chicos, en 4 ó 5 horas puedes llegar a cobrar ese dinero".
Durante el programa, Trigos ha revelado numerosos datos de esta etapa de su vida, desde sus sentimientos hasta su comienzo. El presentador se vio obligado a ejercer la prostitución para poder seguir viviendo ya que no tenía dinero "La primera vez no fue solo ni en Madrid. Un chico me dijo que nos fuéramos a Barcelona y lo intentáramos allí. Lo pagó él porque no podía comer".
El vallisoletano se anunciaba por internet para encontrar clientes, ahí publicaba fotos de su cuerpo pero no de su cara porque no quería que le pudieran reconocer. De hecho, ha revelado que a pesar de esto "En algunas ocasiones me han reconocido y a mucha gente le daba más morbo. Tenía miedo de que lo contaran y se descubriera todo". Además, también ha reconocido que ha estado con otros presentadores que se dedicaban a la prostitución.
Trigos ha revelado que entre sus clientes había personas muy importantes, desde directores de bancos hasta jeques aunque no ha revelado la identidad de ninguno de ellos. Sin embargo, también ha afirmado que hace cuatro años que dejo este mundo, al que no quiere volver. Tras recibir una llamada de Telecinco para un nuevo programa, el presentador regresó de Bruselas donde se encontraba trabajando.
Su exitosa carrera televisiva
Aitor Trigos se convirtió en uno de los rostros más reconocidos de pequeña pantalla. El vallisoletano presentaba los programas con más audiencia de la tarde española con lo que llegó a ganar más de 2 millones de euros. Sin embargo, el presentador perdió todo el dinero en inversiones que no salieron como esperaba y su carrera profesional empezó a decaer hasta no encontrar trabajo y tener que recurrir al mundo de la prostitución.