La cantante ha explicado de forma concreta qué fue lo que le sucedió que estuvo incluso a punto de costarle la vida.
No han sido tiempos fáciles para Ainhoa Arteta pues tuvo que ingresar de urgencia en el hospital por un cólico nefrítico. En aquel momento eran muchas las informaciones que había sobre su situación y ahora ha querido explicar de forma concreta qué fue lo que le pasó a Bertín Osborne en 'Mi casa es la tuya'. Por un lado, la cantante tuvo coronavirus, lo que también la llevó a una situación complicada: "Pillé el primer covid y me quedé en el sofá y me quería levantar y no me pude levantar". "Fue una de las consecuencias del primer covid. Yo cogí la de Wuhan, la del murciélago. Entre las secuelas, de repente un día, a los meses, me encuentro que no me puedo levantar", relataba. Sin embargo, lo más grave vino después y así lo contaba Ainhoa Arteta: "A mí me salvó Andalucía, la seguridad social, y obviamente el hospital Virgen del Rocío. No tengo palabras. Cómo me han tratado, cómo ha sido mi experiencia en el hospital. Nunca una mala cara. Estaba en una planta de UCI de covid pero yo no tenía covid".
"Lo del covid había pasado. Esto fue en julio de 2021 que tuve un cólico nefrítico que se complica y que termina en un fallo multiorgánico, entonces me tienen que trasladar de Puerto Sherry en helicóptero porque no llegaba y llegué por los pelos. En cuanto llegué yo ya no me enteré de mucho más porque me indujeron un coma, estuve seis días en coma inducido y lo único que sé es que cuando salí del coma he sabido que me daban tres horas de vida porque no reaccionaba a nada", explicaba ante un asombrado Bertín.
Momentos superados
Ainhoa Arteta continuaba explicando qué fue lo que le salvó la vida: "Tenía una septicemia, no reaccionaba a ningún antibiótico y solo me quedaba la penicilina a la que yo era alérgica desde pequeña y que no había tomado. La decisión médica fue 'se nos muere, vamos a probar esto. Si se muere por la reacción alérgica da igual porque se va a morir igual'. La suerte que tuve es que la penicilina como no la había probado y mi cuerpo no había generado anticuerpos me hizo una alergia cutánea pero me salvó".
"Yo de esto no me enteré hasta que salí del coma y me dijeron por lo que había pasado. Yo desde entonces, Bertín, celebro la vida. No tengo otra. Por muchas cosas que me pasen. Cuando me pasó todo eso ya me operaron, salí con todas las extremidades prácticamente sin riego, entonces todo son injertos, tengo amputación en la mano, en el pie y todo injertos", añadía la cantante. Además, explicaba que tuvo que ser intubada en varias ocasiones y esto le provocó un problema en una de las cuerdas vocales, por lo que también tuvo que ser operada porque no podía hablar ni mucho menos cantar. Ahora ya ha pasado todo y aunque Ainhoa Arteta ha confesado que aún hay tres notas que se le resisten, disfruta de la vida porque ya sabe lo que es estar a punto de perderla.