Al comienzo de la entrevista, Adara hablaba con Jorge Javier de lo que hacía cuando sucedían momentos malos y se veía allí sola: "Llamaba a mi madre llorando desesperada, tenía que coger la puerta e irme sola, desahogarme por teléfono con ella y volver". La joven volvió a comentar las situaciones delicadas que vivía con Hugo Sierra pero puntualizando algo muy importante: "Cosas feas que pasaban pero quiero dejar muy claro que no ha habido malos tratos ni nada de eso. Él alguna vez me insultó. Fue alguna vez pero eso está ahí. Fea no, cosas más... Del estilo de inútil pero más... Me insultaba en peleas pero no quiero entrar", concluía el tema.
Adara continuó explicando cómo fue su estancia en Mallorca junto a Hugo: "Mi estancia en Palma fue durísima. No lo sabe nadie. Me sentí muy sola, no tenía a nadie, ni a mis amigos ni a mi familia. Solamente le tenía a él y era como si estuviera con un compañero de piso porque era muy frío conmigo, no me hacía mucho caso, es bastante independiente". El tema de la familia fue algo que también se trató en la entrevista y la concursante aseguraba: "Su familia se portó bien pero igual que yo con ellos. Me da muchísima pena todo lo que está pasando porque ellos han vivido otra realidad. Ellos no pueden hablar porque la que estaba en casa era yo con é".
Problemas familiares que marcaron la relación
Respecto al tema del parto, Adara lo tiene claro: "Mi madre no mintió. No me gustó porque son temas muy íntimos pero una vez sale tengo que defenderlo y decir la verdad. Hugo, desde un principio, no quería que mi madre fuera. No quería que estuviera en casa tampoco. Me lo decía. ¿Sabes cuando entras en una dinámica de no querer discutir, de justificar las cosas, de querer estar bien por encima de todo? No sé ni cómo lo permití". La joven ha relatado que su madre se enfadó mucho cuando le dijo que estaba embarazada, porque tan solo llevaba unos meses con Hugo Sierra, cosa que Jorge Javier Vázquez no apoyó y se mostró tajante: "Nadie se tiene que meter en mi vida". Sin embargo, colaboradoras como Belén Esteban y Mila Ximénez entendían perfectamente el enfado de Elena.