Jorge Javier Vázquez recibía una información durante la emisión de 'Sálvame' y ha llamado a Hugo Martín para contarle lo sucedido: "Se ha producido una conversación en el confesionario entre el Maestro Joao y Adara y ella le ha dicho que quiere separarse". Sin duda, esto cae como un jarro de agua fría sobre el padre de su hijo que está fuera esperando a ver lo que sucede finalmente y así se ha mostrado en la conversación telefónica: "Tendré que verlo y que me lo diga ella cuando salga".
"A estas alturas estoy preparado para todo, para lo bueno y para lo malo. No me sorprende nada. No intuía que esto podía producirse. Es mentira lo de la crisis. El futuro matrimonio estaba bien. Si hubiese estado mal quizás le hubiese dicho que esperara otro año o no sé. Como estaba todo bien la apoyé desde el minuto cero. Por el peque estaba dudosa, me decía que a ver qué hacía, que eran muchos meses, que no iba a aguantar tanto tiempo por nosotros", explicaba Hugo Martín. "No sé qué le ha pasado, pienso que la casa es complicada", añadía.
También ha contado cómo era su relación antes de entrar al concurso: "Viene de un postparto que ha sido duro, posiblemente tenga algún tema emocional grande ahí. Nosotros nos pasamos los primeros meses después del nacimiento con mucho estrés, de dormir poco, pero la cosa poco a poco iba mejorando. El amor nunca faltó. No quiero precipitarme pero digamos que hasta que no la vea a ella y hablemos...", decía con tristeza.
La madre tiene muy claro lo que piensa
Para la madre de Adara, lo que está viviendo su hija es un lío de sentimientos absoluto: "¿Quién no ha tenido un Gianmarco en su vida? La vida es así, tiene 26 años y bueno, si nos pasa a nosotros, me pasa a mí con 47 años que de repente subo en el ascensor con el vecino del quinto, pues imagínate una niña que está metida ahí dos meses y que no tiene el cariño de los suyos".
Además, lanza balones fuera y deja la responsabilidad en Hugo Martín: "Ellos dos juntos tomaron la decisión de meterse en esto y pase lo que pase deberían salir de esto. Él tiene que ser consciente de que tiene la edad del padre de Adara y tiene que ser muy consciente de que Adara tiene 26 años. No es lo mismo la cabeza de una niña de 26 años a la de un señor de 46 años. Lo siento, pero le toca tirar del carro y sino que no se hubiera metido en esto y que no se hubiera ido con una niña de 26 años".