Sin embargo, si ha habido algo que ha acaparado la atención en este primer programa ha sido una conversación que han tenido madre e hija de lo más sincera. Si por algo se ha caracterizado Adara ha sido por sus relaciones fallidas, todas ellas públicas y generalmente problemáticas. Ninguna relación ha prosperado y Adara ha llegado a la conclusión de que igual le iría mejor teniendo a una mujer como pareja:
"Como me ha ido tan mal en el amor, lo que me ha pasado hace poco, que me ha salido ranísima, pues yo ya digo 'una mujer'", decía a su madre. Divertida ante esta conclusión de su hija, Elena se lanzaba a hacerle una pregunta de la que no sabía si se arrepentiría: "¿Te gustan las mujeres?". Con dudas, Adara arrancaba a contestar y le decía: "No lo sé, estoy en ese momento que no sé... Sin etiquetas, vamos a dejarlo ahí".
La gran confesión
Tras estas palabras de su madre, Adara no dudaba en preguntar si en su caso también había sucedido alguna experiencia con otra mujer: "La verdad es que no, pero si el día de mañana aparece una mujer que me gusta cómo es pues adelante", decía no cerrándose a nada en un futuro. Sin duda, una conversación madre-hija de lo más sincera en la que no hay ninguna barrera.