Durante esos días de escapada romántica, el dirigente económico tenía una cita con las fiestas de su pueblo, Morella, en Castellón, donde se esperaba su asistencia, como todos los años. Pero, al final, el Puig anunció que finalmente no asistiría porque tenía un "escapada" prevista desde hace mucho tiempo, excusándose para irse de ruta por el norte con su nueva conquista amorosa.
Mientras tanto, su exmujer, no ha salido de su pueblo, Morella. A Amparo Panadero se le ha visto disfrutar de la ofrenda en honor a la Virgen de Vallivana acompañada de sus amigos. La separación está siendo muy dolorosa, concretamente para ella. Además, los dos serán abuelos por primera vez en diciembre. Ximo Puig ya se ha desposado y luce su mano sin alianza de casado, dejando bien claro que ya no le ata nada a su expareja. Después de esta exclusiva, fuentes cercanas al Presidente valenciano han querido aclarar al citado medio que el matrimonio ya no convivía unido desde hace unos meses, por si alguien pensaba que Puig le había sido infiel a Panadero y manchaba su imagen de pública con falsos testimonios.
Gabriela Bravo, una mujer de armas tomar
Gabriela Bravo llegó a la Consejería recomendada por José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno y sonó como posible integrante del Gobierno de Pedro Sánchez, aunque ella declaró que quería seguir trabajando para la Comunidad Valenciana, quizá por su relación con Ximo Puig. Cada vez ha tenido más peso su poder en toda la Generalitat y se convirtió en una de las personas de confianza del Presidente valenciano, siendo su mano derecha. Parece ser que la complicidad profesional traspasó la barrera sentimental y acabó triunfando el amor. Bravo también estuvo relacionada con José Bono, expesidente del Congreso de los Diputados, aunque los dos aclararon que solo eran muy buenos amigos.