Mientras tanto, a las afueras del gimnasio, multitud de fans y amigos de Sala, destaparon una pancarta en la que se podía leer: "Emi nunca caminarás solo". Daniel Ribero, presidente del equipo juvenil en el que jugó Sala, explicó que el jugador "representaba mucho" para todos los vecinos: "Somos una localidad pequeña y Emi era una celebridad, el único jugador que se hizo profesional", explicó Ribero. Este club antes de que se produjese el velatorio difundió un mensaje en redes sociales en solidaridad y apoyo a la familia del jugador: "Te estamos esperando, al igual que el primer día desde que te fuiste, pero esta vez para que te quedes con nosotros para siempre. Eternamente en nuestros corazones", decía el comunicado.
El que iba a ser su entrenador también acudió
Neil Warnock, entrenador del Cardiff City, el equipo por el que había fichado Sala, y por lo que se dirigía hacia la ciudad, acudió al homenaje que se le hizo al jugador: "Él es mi jugador. Firmó para mí, creo que iba a ser fundamental para lo que teníamos pensado hacer y siento que esta es la única buena cosa que puedo hacer", explicó el entrenador del Cardiff.