Los organizadores estiman que sumando la sortija, el juego de pendientes, los dos relojes y los cuatro juego de gemelos desparecidos se podría alcanzar la friolera cifra de 30.000 euros. La marca de joyas Suárez fue la encargada de añadir los complementos a los looks de celebridades de la talla de Clara Lago, Dani Rovira, Emma Suárez o Anne Igartiburu.
El lunes 6 de febrero el jefe de seguridad del hotel y el jefe de producción de la gala se personaron en la comisaría del barrio madrileño de San Blas para notificar a la policía lo sucedido, según informó El Mundo. Ambas personas no saben con exactitud cuándo se produjo el delito pero de lo que sí que están seguros es en qué lugar se encontraban las joyas robadas. El material sustraído se localizaba en una caja detrás de la televisión del hotel.
Ha sido ahora cuando se ha podido saber que el hombre que se encargaba de cuidar y custodiar el motín robado ha declarado ante la Policía de San Blas. El profesional de seguridad ha afirmado que al ver la caja detrás del monitor de televisión pensó en llevársela a casa ya que se pudo imaginar que algo similar podría llegar a pasar. El trabajador también ha afirmado que solo fue una idea ya que luego no tomó esta decisión por miedo a que se las robasen en la calle. En la declaración también ha confirmado que al día siguiente las joyas seguían estando en la habitación del hotel. Lo que concuerda con la versión ofrecida por el jefe de seguridad del hotel y el jefe de producción que afirmaron darse cuenta que las joyas no estaban en su sitio el mismo lunes.
Disputa con el hotel
En estos momentos la policía se encuentra investigando el robo de las joyas de Suárez y se están centrando en averiguar cómo los ladrones pudieron acceder a las inmediaciones del famoso recinto. Por su parte, el hotel Marriott Auditorum de Madrid ha afirmado que en ningún momento ningún trabajador organizador de la gala les llegó a informar de la presencia de las joyas en alguna de las habitaciones. La puerta de la sala donde se encontraba el motín no fue forzada en ningún momento por lo que la policía sospecha de alguno de los trabajadores del hotel.
Los investigadores ya han recibido un cuadrante con los nombres de los trabajadores y el turno laboral de cada uno de ellos para poder ir despejando dudas. Armando Rodríguez, secretario general del Gremio de Joyeros y Relojeros de Madrid, ha declarado a Europa Press: "Es normal no disponer de un vigilante de seguridad específico cuando las joyas no superan una cierta cantidad de valor o no tienes ninguna pieza exclusiva. Lo habitual es contar con una póliza de seguros con determinada cobertura ante este tipo de sucesos".