Tokio, la gran rival de Madrid, ha conseguido dejar a un lado sus desventajas y convertirse en la ciudad que acogerá los JJOO de 2020, superando a Estambul en la votación final. Su proyecto estaba valorado con un nota de 8,02, tan solo seis décimas por debajo del español, contando entre sus grandes bazas el tener una economía solvente, las infraestructuras ya construidas y una tecnología puntera.
Para su candidatura de 2016 uno de sus puntos débiles fue que no contaba con un gran apoyo público, sentir que ha ido cambiando por completo entre sus dirigentes durante estos últimos años. Tokio ya ha demostrado que tiene una fuerte capacidad organizativa, pero todavía tiene que demostrar que es capaz de garantizar unos JJOO seguros y solventar su problema con la central nuclear de Fukushima. En 2020 lo sabremos.
Tokio ya tiene experiencia previa en esto de celebrar unos Juegos Olímpicos. En 1964 la ciudad acogió las primeras olimpiadas televisadas en color y transmitidos en directo. De hecho, la sede principal de aquel año, el Estadio Nacional de Kasumigaoka, volverá a tener ese mismo honor. Su remodelación constará 990 millones de euros, y ha sido encargada a la arquitecta británica Zaha Hadid.
Decepción en Madrid
A partir de las 13:30 de la tarde, la Plaza de la Independencia y la Plaza de Cibeles se han visto abarrotadas por un gran número de personas que no querían dejar pasar la oportunidad de apoyar con su presencia la candidatura olímpica de la ciudad. La música ha ido amenizando la velada, contando como maestros de ceremonia con Tony Aguilar y Frank Blanco que han ido presentando las actuaciones de artistas de la talla de Nena Daconte, Pastora Soler, Carlos Baute o Edurne.
El evento también ha contado con la participación de deportistas que han vivido muy de cerca la experiencia olímpica. Gervasio Deferr, Gemma Mengual o Conchita Martínez han sido algunos de ellos.
Pero la fiesta se ha visto truncada cuando el COI ha descartado la candidatura española en la primera vuelta en favor de sus dos rivales: Tokio y Estambul. El desanimo ha cundido entre los asistentes, perdiendo en un solo instante todas las esperanzas puestas en este gran sueño de futuro. Había gente que no podía contener las lágrimas y es que por tercera vez consecutiva, Madrid se ha quedado a las puertas del triunfo.
Una vez más el sueño olímpico vuelve a dar la espalda a la capital de España. Madrid partía como gran favorita para ser la elegida por el Comité Olímpico Internacional y así poder al fin coger los Juegos Olímpicos de 2020. Pero esto no será una realidad, al menos en un futuro cercano.
Estambul, la otra derrotada
La ciudad más poblada de Turquía no ha conseguido prevalecer frente a su última competidora. Estambul, pese a que se pensaba que era la que más dificultades iba a tener para resultar vencedora (en junio valoró el COI su proyecto con la peor nota de las tres, 6,98 ), ha conseguido dejar a un lado los escándalos de dopaje de 32 de sus atletas y las continuas protestas que se han desarrollan desde el mes de mayo contra su Gobierno y su agresiva política urbanística y superó a Madrid, aunque no pudo con Tokio.