Malas noticias para Shakira: cada vez está más cerca de sentarse en el banquillo de los acusados por tres presuntos delitos de evasión fiscal por los que no ha pagado 14,5 millones de euros a Hacienda en España. Tal y como se ha hecho público, la Audiencia de Barcelona ha rechazado el recurso presentado por la defensa de la cantante y acepta el auto judicial que ve indicios de delitos fiscales y por los que muy pronto podría ir a juicio de no aceptar un acuerdo con la entidad pública.
Tras esta decisión, ahora será la Fiscalía de delitos económicos de Barcelona la que tenga que presentar un escrito de acusación en el que tendrá que especificar los años de prisión que se piden para la colombiana por estos tres delitos de fraude fiscal. Para Shakira todavía cabe la posibilidad de no tener que sentarse en el baquillo y librarse de la cárcel en el caso de llegar a un acuerdo con la entidad pública y realizar así un pago con el que rebajar su pena. En cambio, tal y como también ha transcendido, la defensa de Shakira sigue insistiendo en la inocencia de su clienta.
La investigación que le imputa los delitos
La investigación terminó el pasado verano de 2021 y el juez determinó que entre 2012 y 2014 la cantante ya era residente fiscal en España, por lo que tendría que pagar sus impuestos en el país, cosa que no ocurrió. Para demostrarlo, la investigación llegó a demostrar detalles como cuántas veces iba a la peluquería Shakira en Barcelona; que recibía clases de francés y zumba; e incluso diferentes revisiones médicas durante su embarazo bajo un pseudónimo.
Con ello, esta investigación demostraba que en los años 2012, 2013 y 2014 estuvo en España un total de 246, 210 y 243 días respectivamente, unas cifras evidentemente superiores a 183, que es el número que establece la Ley para considerar que alguien reside en el país y, por tanto, tiene la obligación fiscal de pagar sus impuestos. Algo que, como asegura la investigación, Shakira tampoco hizo.
Además, la investigación también demostraba que la colombiana tenía hasta 14 empresas "sin medios materiales ni humanos" y algunas de ellas en paraísos fiscales, y que se utilizarían para ocultar el destinatario final de sus ganancias, que no era otra que Shakira. A esta investigación también a finales de 2021 la aparición de la artista en los conocidos Papeles de Panamá.