La exsenadora sufría del hígado, y aunque se trató de un fallo multiorgánico, fue originado por este órgano vital.
Según las últimas informaciones conocidas, ya se sabe la causa de la muerte de Rita Barberá. Al parecer falleció debido a un fallo multiorgánico causado por el deterioro de su hígado, el cual no era capaz de purificar. Ésta es la conclusión a la que ha llegado el informe médico a través de la realización de su autopsia que fue realizada tras su repentina muerte en el Hotel Villa Real de Madrid. Información forense
La exsenadora del Partido Popular, y que contaba con 68 años de edad, tenía desde hacía tiempo una cirrosis, una enfermedad propia del hígado y que, en su caso, ya no tenía solución por la gravedad, según ha contado el diario Crónica después de tener acceso al informe forense.
Esta enfermedad hizo que su salud se fuese complicando poco a poco, llegándole a causar también ascitis, lo que hace que el cuerpo acumule líquido en el abdomen a causa de una hipertensión en las venas encargadas de la sangre del hígado.
Por otro lado, en el Instituto Anatómico Forense de Madrid, los médicos que se encargaron de hacerle la autopsia también pudieron comprobar que su riñón estaba muy deteriorado y por eso le extrajeron mucha cantidad de líquido infeccioso. El mismo día que falleció se levantó con bastante ansiedad y síntomas de ahogo, por eso los facultativos del Summa fueron hasta el hotel donde se encontraba, intentaron animarla pero no consiguieron salvar su vida.