El cuerpo hallado entre los restos del avión ha sido recuperado tres días después de su avistamiento pero aún se desconoce su identidad.
El 3 de febrero de 2019 la Subdivisión de Investigación de Accidentes Aéreos (AAIB) anunció que habían encontrado un cuerpo en el fondo del Canal de La Mancha entre los restos del avión en el que viajaba el desaparecido Emiliano Sala junto con el piloto del avión, David Ibbotson.
Tres días después, el 6 de febrero, se llevó a cabo la recuperación de dicho cuerpo. El rescate se produjo con dificultad debido a las malas condiciones del mar. Utilizaron vehículos remotos para extraer el cuerpo del fondo del mar que posteriormente fue trasladado a la Isla de Portland, donde se procederá a la realización de la autopsia para esclarecer si el cuerpo pertenece al futbolista o al piloto del avión. El avión en el que viajaba Emiliano Sala cuando desapareció estaba realizando el trayecto entre Nantes y Cardiff. El futbolista acababa de ser fichado por el Cardiff City, al que su antiguo club, el FC Nantes, reclama el pago por el traspaso del futbolista. La cifra pactada entre ambos clubes asciende a 17 millones de euros por los que el Nantes tomará acciones legales si el Cardiff City no se los abona en un plazo de 10 días.
Desde la desaparición del avión el 21 de enero, han pasado dos semanas hasta que han conseguido encontrar y rescatar sin vida a uno de los dos desparecidos. Esto se debe a que John Fitzgerald, el jefe del operativo de búsqueda decidió suspender la búsqueda tres días después de la desaparición por las malas condiciones del mar que ponían en peligro a los trabajadores del rescate. Un rescate largo y complicado
La decisión del jefe del operativo tuvo como consecuencia una serie de acusaciones en las redes sociales hacia él. John Fitzgerald, se ha defendido de las mismas alegando que su trabajo es salvar las vidas de Emiliano Sala y David Ibbotson y no rescatar aviones: "Estábamos ahí para salvar vidas".