El Presidente del Mónaco, Dmitri Rybolovlev, fue detenido el martes 6 de noviembre por la Policía. Además, registraron el domicilio del ruso a petición de un juez monegasco, según ha informado el diario francés Le Monde. El dirigente del equipo de fútbol francés se encuentra dentro de una investigación judicial abierta hace un año por la Fiscalía General de Mónaco por corrupción, tráfico de influencias activo y pasivo, además de complicidad en esos delitos.
El propietario del club fue puesto en libertad en la tarde del 7 de noviembre, pero bajo control judicial. Aunque desde la prensa francesa aseguran que la imputación del dirigente ruso no tiene nada que ver con la actividad futbolística. Junto al empresario multimillonario fueron imputados la esposa y el hijo del exdirector de los Servicios Jurídicos de Mónaco, además de la abogada de Rybolovlev, Tetiana Bersheda.
La Fiscalía de Mónaco están llevando a cabo diferentes registros en el Principado, similares a los que tuvieron lugar el pasado martes en el domicilio del Presidente del Mónaco. Además, el club se encuentra en el foco mediático después de que Football Leaks publicase el lunes 5 de noviembre que el Mónaco utilizó un montaje financiero, sociedades domiciliadas en paraísos fiscales, para encubrir inyecciones de dinero de Dmitri Rybolovlev sin infringir el equilibrio financiero que impone la UEFA.
Se enfrenta a un pleito desde 2015
Los hechos investigados tienen que ver con el pleito al que está haciendo frente el presidente desde 2015 con el marchante de arte suizo Yves Bouvier, después de que le acusase de sobrevalorar obras de arte que adquirió por un total de 1.000 millones de euros. Durante esta investigación, la justicia francesa descubrió que la abogada del multimillonario ruso mantenía una relación estrecha con Philippe Narmino y que trató de servirse de su condición de responsable de Justicia del Principado para influir en su demanda contra Bouvier.