Natalia de Santiago: Pues porque realmente, aunque no lo parezca, hay muchísimos autónomos, emprendedores, pequeños empresarios, y mucha gente que lo está valorando. Y realmente había poca información para ellos, hay muy pocos recursos para saber qué tengo que tener en cuenta cuando emprendo, cómo puedo hacer para ganar más dinero o perder menos... Recibí muchas consultas que me decían que tenía a los autónomos olvidados y que no les hacía ni caso. Es verdad que cada vez son más, y además yo creo que la economía y la sociedad va a que cada vez haya más freelancers, más autónomos, más empresarios, y entonces me pareció buen momento intentar arrojar un poco de luz, que a veces no lo tienen fácil, y poner mi granito de arena.
B: Es cierto que escuchando a autónomos suena muy complicado y no resulta fácil todo lo que hay que hacer
N.S: Lo que es curioso es que hay muchísimos, porque además el tejido empresarial español es de empresas muy, muy pequeñas, hay muchísimas empresas muy pequeñas, pero es verdad que por lo menos, yo he buscado, porque antes de ponerte a escribir un libro, miras a ver si ya está escrito. Y he encontrado muy poco en todos los sentidos, muy poca información. Ves mucho libro de un tipo de emprendedor muy concreto, de youtubers de cero a diez, cien millones, de cómo hacer tu unicornio, pero es que la mayoría de la gente tiene otro tipo de trabajo, monta otro tipo de empresas, y estos libros no les aplican, porque yo no quiero ser youtuber, oye, que yo soy fisioterapeuta, y lo que voy a montar es una clínica. Entonces yo quería hacer un libro que tuviera en cuenta a los millones de autónomos y emprendedores y pequeños empresarios que están trabajando mucho todos los días y para los que realmente parece sí, que les prestamos como poca atención. Al final los autónomos responden por todo, aunque luego resulte que te hagas más grande y te vaya muy bien, pero sigues llevando todo el peso de esa empresa.
B: ¿Hay que ser rico o al menos tener una buena posición financiera para lanzarse, para tener la fortaleza y tomar la decisión de emprender?
N.S: No, no hace falta ser rico para emprender. Yo creo que lo que sí que hay que tener es tiempo, porque al final se trabaja muchísimo casi siempre, casi todos los autónomos y los emprendedores trabajan muchísimo. No hace falta ser rico, lo que pasa es que sí que es verdad, hay negocios que se pueden montar con un ordenador desde tu casa y cero gasto, y hay otros tipos de negocios que requieren una cierta inversión. Y lo que puede ser a veces difícil encontrar es ese dinero si no lo tienes tú. Porque ir a un banco cuando empiezas, pues muchos te cierran la puerta. Te dicen que no te conocen de nada y que si tu negocio no ha empezado, cómo te van a dar dinero. Sería conveniente que se fomentara el acceso a la financiación para todos los negocios que empiezan, pero ya hay cosas. Tienes entidades como el ICO o el Enisa, que te pueden ayudar a encontrar ese dinero si tú no lo tienes, pero desde luego para emprender no hay que ser rico. Lo que hay que tener es ilusión y mucha capacidad de trabajo, eso sí.
B: ¿Por qué es tan importante que existan entidades como ICO o Enisa?
N.S: Es interesante que existan entidades como el ICO y como Enisa que te permitan acceder a financiación, sobre todo al principio, cuando estás empezando. El banco cuando ya te va bien, te da dinero encantado, pero cuando empiezas y no te conoce de nada, pues te lo pone bastante difícil.
B: ¿Qué pasos hay que dar para emprender?
N.S: Lo primero es entender la diferencia entre trabajar por cuenta ajena y cuenta propia y pensártelo bien, porque es otra forma de vida y tiene otro tipo de sinvivires. Entonces, entender bien la filosofía, las diferencias que hay, las diferentes obligaciones, eso es lo primero. Luego tendrás que decidir, voy a ser autónomo, voy a montar un SL... También sacarse el certificado digital, que te abre una cantidad de tiempo y de gestiones enorme, que parece una tontería, pero ya me lo agradecerás después, y tener muy claro cuáles son tus obligaciones con Hacienda y la Seguridad Social, que yo en el libro lo llamo la familia que no eliges, porque estos van a ser tus nuevos jefes, y hay que tenerlo muy claro y mejor eso llevarlo ya entendido, estudiado y calculado, porque si no nos podemos llevar mucho susto y mucho disgusto. Y luego ya empezar a hacer números, porque sobre el papel ya podemos empezar a ver tres cosas. Si nuestro negocio va a ser rentable, es decir, si estamos planteando un negocio que puede darnos beneficios sostenidos en el tiempo, y eso ya haciendo los primeros números ya se puede. Luego, la siguiente es, aunque sea rentable, es una buena inversión, es decir, ¿cuánto dinero le tengo que meter a esto para sacarlo adelante? ¿Y qué retorno me va a dar? Porque hay veces que dices, sí, te va a dar beneficios, pero son tan pequeños y tienes que poner tanto dinero que igual no compensa y merece la pena buscar otro tipo de negocio o de inversión que nos pueda dar más retorno por el mismo dinero. Y la tercera cosa también, siempre hay que fijarse en la pasta, que no me vaya a quedar sin gasolina, porque al final tú puedes tener un Ferrari, un piloto con un potencial enorme que pueda ganar todas las carreras, pero si ya te queda el coche sin gasolina a mitad del recorrido, pues en esa carrera no vas a llegar a la meta.
Se trata de hacer números y según los vas haciendo, te vas planteando cosas de tu negocio y tomando decisiones que se toman mucho mejor con esa información puesta en papel. Y con eso ya puedes empezar a decidir cuánto tengo que invertir, en qué, qué es lo más importante. Empezar a valorar quién es tu cliente, qué quiere mi cliente, qué está dispuesto a pagar mi cliente, porque el cliente manda siempre. Y a formarte en las áreas, entender muy bien que cuando tú eres autónomo o emprendedor, eres la empresa entera, y una empresa tiene muchos departamentos y te va a tocar hacerlos todos de alguna manera. Con lo cual empezar a formarte en aquellas partes en las que no estés tan puesto, como por ejemplo las finanzas o cualquier otra cosa. Porque uno piensa que es ponte por tu cuenta para hacer lo que te gusta y no. Es para hacer lo que te gusta y otro millón de cosas que ni te gustan ni se te dan bien. O a vender, porque tú eres buenísimo en lo tuyo, pero no has vendido en la vida ni tienes espíritu comercial y no hay ningún negocio que sobreviva si tú no vendes bien, porque además nadie va a vender tu negocio mejor que tú. Son cosas que a veces no somos conscientes, porque cuando tú trabajas para alguien, a ti te contratan para hacer lo que a ti se te da bien. Pero cuando tú emprendes te va a tocar hacer eso y otro millón de cosas que a lo mejor se te dan terriblemente mal y que al principio a lo mejor no puedes subcontratar. Eso tenerlo bien claro y formarse bien y estar dispuesto a arremangarse y aprender muchas cosas nuevas también.
B: Antes hablabas de los youtubers, que también son emprendedores. ¿Qué piensas de las personas que presumen de hacerse ricas muy rápido?
N.S: Son emprendedores. Yo creo que muchas veces es engañoso, no porque ellos te quieran engañar, sino porque siempre parece que se han hecho ricos muy rápido. La mayoría de los youtubers buenos llevan mucho tiempo y sobre todo llevan muchísimo trabajo invertido. Esa gente trabaja mucho y es muy buena en lo suyo. Es decir, el dinero rápido no existe. Si tú ves un youtuber que se está forrando, ese youtuber lleva muchos años invertidos en crear su comunidad, en crear su canal. Es muy bueno en lo que hace y trabaja muchísimo. Puede que diez años después empiece a trabajar menos porque ya le va de lujo, pero la realidad es que ninguna fortuna, ni Mark Zuckerberg, ni Elon Musk... Luego se cuenta la historia y parece que ha sido rápido. Nunca ha sido rápido. Es que a lo mejor el youtuber es rico con 23, pero es que lleva desde los 12 en YouTube poniendo vídeos, es que lleva 10 años realmente dedicándole muchísimas horas al día. Es como los niños prodigios. 'Uy, este niño con 11, qué bien toca el piano'. Es que lleva tocando el piano 14 horas al día desde los 4 años. Es que al final nadie que sea bueno en lo suyo se ha hecho bueno de un día para otro. Todos los youtubers buenos tienen mucho talento y han currado mucho para llegar a tener ese talento. No hay un influencer, aunque te parezca muy superficial lo que hacen hoy, este influencer que solo saca modelitos, ese influencer es muy bueno en lo suyo, lleva muchos años haciéndolo y trabaja muchísimas horas al día. Eso es lo que yo creo que es el engaño. No es que no se puede hacer, es que es muchísimo más difícil de lo que parece.
B: Luego siempre está el que tiene talento
N.S: Como el que tiene talento para los ingenieros que tienen talento para diseñar o los arquitectos que tienen talento para diseñar una casa. Es un talento como otro cualquiera y la gente que es muy buena y que tiene un talento, pero nadie tiene talento si no lo trabaja. Tú puedes tener talento musical, pero si no practicas nunca, pues no vas a tocar bien el piano. Entonces, esto es lo mismo. Tienen un talento en comunicación, en todo. Es increíble y además mucho trabajo. Es verdad que luego lo piensas y además muchos ya tienen hasta equipos, a lo mejor tienen 10 personas trabajando para ellos y currando mucho también. Yo no les quito mérito. Lo que digo es que no es nada fácil replicarlo. Que a veces parece que coges el libro y dices, 'uy, esto me pongo mañana y pasado mañana voy a ser yo Ibai Llanos'. Pues no. Tiene muchísimo mérito porque no es nada fácil hacer lo que ha hecho y conseguir lo que ha conseguido. Tú no vas a ser Madonna, que lo digo porque me acaba de saltar en el feed de Instagram, si no tienes un aquel, Eso es imposible. Lo que pasa es que podrías tener el aquel de Madonna y nunca llegar a ser Madonna porque no te has pagado las matadas que se ha pegado Madonna para ser lo buena que ha llegado a ser en lo tuyo. Entonces, tener talento es el punto de partida, digamos, pero no es suficiente. El trabajo no te lo quita nadie. Yo no he visto ningún caso de ningún emprendedor ni de nadie que triunfe en nada que no haya trabajado mucho. El otro día leía una entrevista de Paco de Lucía y decía que su padre le hacía tocar la guitarra 14 horas al día desde los 5 años. Paco Lucía con 17 era buenísimo, porque llevaba 13 años tocando la guitarra 14 horas al día. ¿Tenía un talento especial? Desde luego, pero es que lo ha trabajado mucho. Que otro a lo mejor le dedica las 14 horas y no es tan bueno tampoco, eso también puede pasar, que no tiene ese aquel, pero desde luego sin las 14 horas nadie llega a ser Paco de Lucía.
B: ¿Todos llevamos un director financiero dentro?
N.S: Sí, sí, sí. A lo mejor no todos llevamos un director financiero contento dentro y nunca te va a llegar a encantar. Pero el mensaje que quiero transmitir es que son sumas y restas, que todos, aunque hayas hecho letras puras en el bachillerato y digas yo es que cogí latín y griego y no di matemáticas, también te puedes enterar. Es más fácil de lo que parece. El problema es que nos lo suelen explicar muy mal y muy complicado, pero si se explica fácil se entiende muy bien. Y yo he intentado hacer mucha labor de traducción. Los palabros de la administración que parece que son muy complicados, pues intentar explicártelos fácil, porque de verdad que todo el mundo lleva un director financiero dentro. Porque además todo el mundo gestiona su dinero, su día a día. Todo el mundo gestionamos nuestras finanzas domésticas. Y las de una empresa tampoco son mucho más complicadas. Hay que despertar al director financiero que llevamos dentro, tanto para lo personal como para lo profesional.
B: ¿Cuál es el mayor error que cometen los emprendedores?
N.S: Uno, no ocuparse de las finanzas, porque todos los negocios que fracasan, fracasan porque se quedan sin dinero. Con lo cual, aunque te guste o no te guste de las finanzas de tu negocio, te tienes que ocupar sí o sí. Lo que no quita que subcontrates, que tengas asesoría y gestoría, que en eso nunca hay que ahorrar, porque si no, lo barato sale caro. Pero ocuparte de las finanzas de tu negocio, punto número uno. Y luego hay mucha gente que intenta decirle al cliente lo que necesita. Y el cliente siempre tiene la razón, y el cliente es el que pone el precio de tu producto. Con lo cual, abre muy bien las orejas, entérate de qué quiere tu cliente, entérate de cuánto está dispuesto a pagarte por eso, concéntrate en las cosas que el cliente aprecie y por las que te quiera pagar, y no en las que a ti te parecen más bonitas o más importantes o más apetecibles, y a partir de ahí empieza a construir tu negocio.
B: ¿Qué le dirías a alguien que quisiera emprender? Bueno, además de leerse tu libro, claro
N.S: Que es muy bonito, que puede dar muchas satisfacciones y, como no, mucho dinero, pero que todo lo que aprendamos antes de lanzarnos, todos los números que hagamos antes de lanzarnos, nos van a ahorrar dinero, disgustos y tiempo. Tampoco hay que pecar de estar pensándolo siempre y no lanzarse nunca, llega un momento que tienes que decir, hoy, a la piscina, pero dedicarle un tiempo a planear, a ponerlo sobre papel, a contárselo a la gente, a escuchar lo que te dice la gente, oye, esto no lo veo, porque se aprende mucho, y cuanto más preparado lo lleves el día que te lances, menos disgustos vas a tener.
B: Y así puedes darte cuenta, haciendo tus números, tus cálculos y tus cábalas, de que eso no va a salir. Entonces, igual, antes de tirarte a la piscina, te ahorras dinero y disgustos
N.S: Y sobre todo, no quiere decir que no puedas emprender, simplemente que tienes que pensar en otro tipo de negocio, o plantear ese negocio de otra manera. No se trata de rendirse tampoco, pero si tú pones tu negocio sobre papel y no funciona, búscate otro o cámbialo hasta que funcione.