Campeón de Europa de 125 cc y uno de los grandes pilotos del motociclismo. El carácter competitivo de Marco Simoncelli en el circuito no dejó indiferente a nadie y le llevó a protagonizar disputas con otros compañeros, como la acontecida con Jorge Lorenzo en el circuito de Estoril en 2011, con Héctor Barberá en Mugello en 2008 y una semana más tarde, con Ãlvaro Bautista en Sepang, escenario de su trágica pérdida.
El joven de Honda, nació hace 24 años en Cattolica, ciudad turÃstica en la costa adriática de la Emilia Romagna. Amigo Ãntimo de Valentino Rossi, que vivÃa a escasos kilómetros suyos, éste no pudo más que echarse las manos al casco cuando fue testigo del accidente que ha costado la vida al italiano.
Desde pequeño soñaba con ser un gran piloto de motociclismo, aspiración que logró alcanzar en 2002 cuando ganó su primer campeonato. Su ambición le llevó a ser uno de los motoristas más inconformistas en la pistas, siempre querÃa llegar al lÃmite. En 2005 y nuevamente en el octavo de litro, Simoncelli ganó la carrera de Jerez, por lo que decidió dar el paso adelante a la categorÃa de 250 cc como representante del equipo Gilera, de cuya mano acabó siendo campeón del mundo dos años después.
Con el mismo equipo logró su primera victoria el 1 de junio de 2008, con ocasión del Gran Premio de Italia en Mugello. Pero sin duda, su gran salto a Moto GP se produjo en 2010. En la categorÃa reina compitió con su gran Ãdolo y amigo: Rossi. No obstante, el carácter alegre y el buen humor que le caracterizaban se apagó en el circuito el 23 de octubre de 2011. El mundo del deporte llora la pérdida de uno de los grandes inconformistas del motociclismo.
Trágico final en la pista de Sepang
La carrera acababa de empezar. Era la segunda vuelta y Simoncelli afrontaba una curva de derechas cuando perdió el control de su moto. El italiano se aferró al manillar y cruzó el asfalto a lo ancho, quedando en medio de la trayectoria de Colin Edwards (Yamaha). La moto del estadounidense pasó por encima el cuello de Simoncelli, que perdió el casco a consecuencia del escalofriante suceso.
En el accidente también se vio involucrado el mejor amigo en la parrilla de Simoncelli, Valentino Rossi (Yamaha), que chocó con Edwards pero logró evitar la caÃda. Mientras que el estadounidense sufrÃa un fuerte impacto, Simoncelli quedaba inerte sobre el asfalto de Sepang.
La bandera roja hacÃa presagiar que algo no marchaba bien en la pista. 'Super Sic', como le llamaban cariñosamente sus más allegados, con parada cardiorrespiratoria, fue trasladado a la clÃnica móvil e inmediatamente llevado a un hospital cercano en helicóptero, pero la gravedad de sus lesiones impidió que los médicos pudieran salvarle la vida.
Cinco pilotos han perdido la vida en el asfalto los últimos 22 años
Un año después del fallecimiento del japonés Shoya Tomizawa, el 'paddock' se vuelve a teñir de luto. Se disputaba el Gran Premio de San Marino de Moto2 cuando el piloto se fue por los suelos. Su moto rodaba detrás y desgraciadamente no pudo esquivar a Scott Redding y Ãlex De Angelis, que se habÃan envuelto en una brutal colisión.
No menos dura fue la muerte de Daijiro Kato en 2003. El también piloto japonés disputaba en Suzuka el Gran Premio de su paÃs cuando perdió la vida. Diez años antes, otro piloto nipón, Nobouki Wakai, falleció en un accidente en el circuito de Jerez, aunque la tragedia en este caso fue mayor ya que no se produjo en carrera, sino al atropellar a un aficionado sin acreditación en la zona de boxes.
En 1989, Iván Palazzese, falleció al estrellarse en Hockenheim contra la del italiano Fabio Barchitta el 28 de mayo en el GP de Alemania. El piloto venezolano tuvo la mala fortuna de verse arrollado por los pilotos que le perseguÃan en carrera. Un lastre que ya se ha cobrado la vida de cinco piloto estos últimos 22 años.